Es sábado por la mañana y Barcelona parece que desde hace una semana ha vuelto a despertar después de más de dos meses de confinamiento. En las terrazas vuelven a juntarse grupos de amigos -siempre respetando la distancia de seguridad- ansiosos por retomar esa última conversación que dejaron a medias.
Y es que, ¡qué le vamos a hacer si nos encantan las terrazas! y si van acompañadas de una caña bien fría y un buen aperitivo son capaces de tele transportarnos a otro mundo. Por eso, hoy queremos rememorar nuestras terrazas, que vuelven en época de sol y buen tiempo, con una selección de nuestras 10 favoritas en Barcelona; terrazas interiores, recoletas y que dan un plus de intimidad al comensal que quiere ponerle cara al tópico “oasis urbano”. Las hay más elegantes, más informales, de comida tradicional y con toques exóticos, pero todas merecen que las conozcas.
El Mercader de L’Eixample
En un rincón del corazón del Eixample barcelonés, esquina entre el Passatge Mercader y la calle Mallorca, se alza el edificio modernista que acoge a El Mercader de l’Eixample, un restaurante de cocina tradicional catalana y, a la vez, ecológica y km 0 que apuesta por la cocina de producto, ecológica y de proximidad.
Una carta sin dogmas de primeros y segundos, todo pensado para compartir y organizado en tres categorías: una primera de “picoteo de la barra del Mercader”, con pica pica ininterrumpido todos los días de la semana; una segunda con “los clásicos del Mercader”, platos que se mantienen todo el año; y finalmente una tercera con “sugerencias de temporada”.
C/ Mallorca, 239
Chez Cocó
Mezcla de rotisserie y bistró con una inconfundible decoración de Lázaro Rosa Violán; ollas de cobre, objetos de porcelana, techos altísimos con lámparas de araña que visten y predisponen a partes iguales, pero su secreto mejor guardado es la terraza que alberga en su interior.
Las aves de corral son protagonistas en Chez Cocó, piezas como el pollo de Lumagorri o el de pata negra del Penedés enaltecen un producto muchas veces denostado en la gastronomía, pero aquí no hay lugar para plumíferos hormonados, esto es Pollo con mayúsculas.
Av. Diagonal 465
Roig Robí
En 1982, Mercé Navarro fundó Roig Robí, un espacio gastronómico referente en Barcelona.
Las diversas y dinámicas salas que lo componen aún conservan su esencia clásica. Entre ellas, cabe destacar su patio interior, cuyo ambiente dista completamente de la ciudad: en pleno corazón de Barcelona puedes sentarte en una mesa rodeado de naturaleza. Un patio que alberga el recuerdo de un sauce llorón, y que los años ha permitido que su flora crezca y se decore naturalmente.
Su carta ofrece verdaderas maravillas, como la tostada de calçot con romesco, los guisantes con butifarra negra, el estofado de sepia, la lubina con coca de cebolla, el tartare de lubina y gambas con caviar de trufa, el exquisito timbal de rabo de buey… Sus postres no se quedan atrás, destacando la crema de yogurt con sorbete de mandarina o el helado de avellanas con merengue gratinado. Todo elaborado con el pescado más fresco del día, verduras de temporada y cercanía, y con carnes con D.O.
C/ Sèneca, 20
El principal de l’Eixample
La terraza interior de El Principal, típica de la arquitectura de l’Eixample barcelonés, se convierte en el marco ideal para una cena o comida al aire libre y también para la celebración de aperitivos y cócteles de grupos.
Su carta está basada en platos típicos de la gastronomía catalana, con productos de proximidad y de temporada. Una cocina donde el protagonista es el producto, en la que cada ingrediente tiene su sabor, aroma y textura. Una cocina para comer bien, bueno y sano.
C/ Provença 286
Flax & Kale
Si eres de esas personas a las que no apasiona demasiado los productos de origen animal, pero que de vez en cuando come pescado o marisco, tienes que saber que podrías ser flexiteriano. Y, ahora, como nuevo flexitariano, ¡bienvenido a Flax & Kale!
Flax & Kale, de Teresa Carles, ofrece una carta repleta de opciones saludables en la que los productos de la tierra son los actores principales. No te equivocarás si pruebas su original propuesta de sandía a la parrilla o la vichissoise de kale, optas por un principal como el súper tagliatelle o la mini burger de salmón, o dos clásicos del Teresa Carles: el arroz negro tailandés Teresa Carles y la lasaña vegana.
Podríamos decir mucho sobre su propuesta gastronómica, pero aquí estamos para hablar de terrazas. Y es que la azotea de Flax & Kale, convertida en una terraza con jardín, es ideal para disfrutar de las vistas mientras pruebas uno de sus zumos multivitamínicos.
C/ Tallers 74
Dos torres

Imagen: Dos Torres vía Restaurant Dos Torres
Si tienes la suerte de encontrarte por el barrio de Sarrià, estarás cerca de hallar el oasis que va a salvarte del ruido y calor sofocante de las calles de Barcelona. El Dos Torres se encuentra en una preciosa villa modernista, y podemos asegurarte que una vez dentro, te costará salir. Igual de difícil será la elección entre su selección de tapas y platillos. Como sabemos que seguramente has decidido olvidarte de todo lo que ocurre en el mundo exterior contemplando la jacaranda de su terraza, vamos a ayudarte con lo que tienes que pedir.
No te equivocarás si te decides por el sashimi de salmón marinado, el vasito de gazpacho de tomate y cereza con nieve de queso o el ravioli artesano. Acertarás con el canelón de aguacate y tartar de atún rojo. Pero es que tampoco puedes dejar de perderte el pulpo asado al aceite de pimentón de la Vera, ni el tartar de buey cortado a cuchillo. Tómate tu tiempo, que no hay prisa, sigue mirando la jacaranda.
Via Augusta, 300
Surf House
Siéntete en la Barceloneta como si estuvieras en la californiana Venice Beach. Y es que Alex Knoepfel tuvo la idea de montar una piscina de olas en Barcelona, aunque finalmente decidió mojarse con otro proyecto, el Surf House. En primera línea de mar, podrás disfrutar de una amplia carta de cócteles, como el exótico Japan Mary (con sake, zumo de tomate, wasabi y jengibre) o el delicioso Shane Cucumber (elaborado con Saint Germain y tequila Don Julio).
¿Te ha entrado en hambre? Disfruta de sus fantásticas hamburguesas, como la Namaste Tandoori (filete de pollo con salsa tandoori, verduritas pochadas y chutney de mango) o la Cangreburger (mezcla de cangrejo con cebolla, tomate, salsa, crema agria, salsa rosa, eneldo y patatas paja).
Xup xup
Una de las cosas buenas que tiene Barcelona es, sin duda, la playa. Y por fortuna, cualquier playa tiene su chiringuito. El Xup Xup está situado en el paseo marítimo de la Barceloneta y su terraza está en la misma arena, a escasos metros de la orilla.
Disfruta de una sopa de pescadores, una paella de pescado y marisco o un arroz del Señorito, sin tener que levantar la vista del mar. Si aún no tienes suficiente, prueba también la suprema de merluza con crema de suquet de roca o unos raviolis gigantes de espinacas, calabacín y queso fresco.
Passeig Marítim de la Barceloneta
Makamaka Beach Burger Cafe
Sus hamburguesas han hecho que en este local se reúna gente de lo más diversa, empezando por los mismos propietarios de Makamaka Beach Burger Cafe. Situado junto al mar, este local surfero de nombre hawaiano ofrece deliciosas hamburguesas de inspiración norteamericana con toques internacionales.
Pero no todo acaba aquí, Makamaka además sirve increíbles cócteles, como el Mexican Breakfast (tequila, espresso, licor de canela y licor café), el Wild Navy (gin, albahaca, azúcar, limón fresco, soda y fresa), el Big Kahuna Mojito (ron, fruta de la pasión, jarabe de miel, menta y soda) o el American Barrel (bourbon, oporto, naranja, limón y jarabe de canela). Con un cocktail así en la mano, ya habrás dejado atrás todas tus preocupaciones.
Can fisher
Can Fisher es conocido por sus magníficas vistas gracias a su excelente ubicación, nada más y nada menos que en la misma orilla de la playa de Barcelona.
Uno de sus must son sus pescados, seleccionados y traídos diariamente desde la lonja del Puerto y servidos, prácticamente siempre, a la brasa y con algún sutil condimento. Can Fisher también es famoso por sus paellas y arroces, y la verdad sea dicha: se merecen ese puesto.
Su carta cambia en función de la estación para trabajar con el mejor producto de temporada y se inspira en la esencia de los veranos en la Costa Brava; época llena de comidas al lado de la playa, oliendo a mar y degustando el mejor pescado.
Blu Bar

Imagen: Blu Bar vía Blu Bar Poblenou
Seas o no amante del surf, si quieres disfrutar de un buen menú Blu Bar es el lugar perfecto para que pases tus mediodías y tardes con amigos entre aperitivos y copas.
Si estás cerca de la rambla de Poblenou, no te cortes y écharle un ojo a la carta de Blu Bar, fresca y renovada, que se adapta a todas tus preferencias culinarias. ¿Te apetece algo ligero y healthy? Sus ensaladas bowl son todo un éxito.
¿Quieres algo más contundente? La estrella de la casa son los Sandwiches Gourmet, una selección de bocadillos elaborados con masa de pizza artesanal; o el Saltimbocca Italiano, con mozzarella de búfala, aguacate, tomate, cebolla y rúcula.
Si en vez de disfrutar de su terraza durante el mediodía, prefieres pasarte al atardecer, también te recibirán con los brazos bien abiertos: tienen una extensa carta de cócteles, entre ellos los Cocktails al Blu, de elaboración propia, como su Margarita con zumo de pomelo y limón, el Capri Frozen, o el Gin Blu de ginebra, lima y Ginger ale.
*Este listado se irá actualizando a medida que vayan abriendo nuevas terrazas.
** Os recomendamos reservar en todas ellas ya que el aforo estará limitado.
Texto: Irene Gonzalvo