Bar La Camila

Clara y María abrieron su pequeño Bar hace siete meses con la intención de crear un espacio donde todo el mundo se sienta cómodo. En este poquito tiempo, han conseguido que muchas personas se sientan como en casa. Un mobiliario y vajillas de antigüedad, flores frescas y fotos familiares emanan la nostalgia que movió a sus fundadoras a emprender con este proyecto.

Creando comunidad con los negocios de Gracia, el Bar La Camila cuenta con una carta de platos tradicionales como la tortilla de patatas con pa amb tomàquet, croquetas, flautas o cruasanes elaborados por proyectos de la zona como el Obrador de La Nena, Tres a la cuina, el Forn Ideal o la pastelería Oriol Carrió y un fuera de carta que va variando en función de la disponibilidad de los productos. Eso sí, en todo momento hay una constante; que sea de proximidad.

En mi visita (estoy segura de que será la primera de muchas) tuve la oportunidad de probar el suave vino natural Mala Herba de Finca Parera como acompañamiento para unas deliciosas olivas, una ración de queso y la inmejorable tortilla del Obrador de La Nena. Si eres más de dulce, también te recomendamos el bizcocho de mármol con puro sabor a mantequilla y cacao y uno de los dulces más sencillos y a la vez más exitosos: el pan con chocolate.

Las cafeterías de Barcelona se han inundado de influencias de otros países europeos como los latte, brews y otras bebidas que forman parte del día a día de muchos barceloneses. Aunque esto pueda leerse como un enriquecimiento cultural, es necesario reivindicar los lugares donde el café con leche aún se llame café con leche y consultar su carta sea como estar en casa de tu abuela.