Bicos, tradición y personalidad gallega

Bicos es el proyecto de una pareja de gallegos residente en Barcelona que nació hace poco más de dos años con la idea de dotar a la ciudad de una casa galega en la que la cocina tradicional, el producto honesto y la personalidad fuesen los tres ejes vertebradores de su oferta gastronómica. A los pies de la Sagrada Familia, Bicos se presenta como un restaurante que, ofreciendo los platos típicos de la región atlántica, también apuesta por recetas con un punto actualizado.

La experiencia en este restaurante empieza nada más entrar por la puerta. Es un local decorado con gusto: combina mesas de mármol con sillas de madera, la iluminación es agradable y el azul de las paredes recuerda al océano que baña las costas de Galicia.

Con el objetivo de ofrecer una cocina cercana, llevando la tradición gallega a la actualidad, los dueños de Bicos han diseñado una carta variada en la que el producto gallego es el principal protagonista. Como no podía ser de otro modo, también se hacen guiños al producto local y se ofrecen platos de temporada.

La amplia oferta de platos para compartir permite que para empezar se pueda probar un poco de todo: los clásicos que no pueden fallar como la empanada (que varía en función del día), las croquetas de cocido o el salteado de langostinos, cachelos y pulpo combinan con platillos actualizados como la vieira con fondo de cebolla caramelizada o las zamburiñas a la plancha con alioli de mango.

Los segundos platos, con más fundamento (o xeito como dicen en Bicos), se reparten entre pescados y carnes, entre los que destacamos el bacalao soasado al pilpil, erizos de mar y patata rota o la carrillera de ternera con salsa de castañas, que servirán para cerrar el apartado de salados de la mejor manera posible.

En Bicos saben que una comida no puede terminar sin el toque de dulce y es por eso que debes reservar un espacio si quieres rematar con el postre. Nosotros te recomendamos la leche frita casera, el arroz con leche caramelizado (ambos acompañados de helado de vainilla) y como capricho, las cañitas de O Carballiño.

Seas gallego o no, con morriña o sin, Bicos es un restaurante que no puedes dejar de visitar si el paladar te pide auténtica gastronomía gallega.