El Café Henrie es un pequeño café de inspiración parisina situado en en el Lower East Side de Manhattan. Su propietario, el artista André Saraiva, que también tiene en su currículo la puesta en marcha de varias discotecas exitosas, como Le Baron, declaró a la revista Vogue que lo que buscaba con este café es llevar sus hábitos parisinos a Nueva York, es decir, sentarse durante horas en una cafetería, leer los periódicos y beber café tras café. Y ciertamente la atmósfera que creó en su café invita a ello.
El azul cerúleo y el rosa crean un mundo aparte en este pequeño rincón de Manhattan que parece sacado de una película de Wes Anderson. Camille Becerra, la chef en residencia, es una de esas chefs que además de cocinar excelentemente consigue reflejar su creatividad en todo lo que hace, desde la presentación de los platos que salen de su cocina, que son puro arte, hasta las recetas que publica en revistas o los estilismos culinarios que crea, su universo va mucho más allá de los fogones.
Becerra creó un menú muy sencillo con coloridos y nutritivos platos que además de ser deliciosos, también son sanos. Ingredientes como las semillas de chía, yogurt de zanahoria y harissa, verduras encurtidas, tahini o coco fresco dan color y matices a sus platos. Este menú, que incluye dragon bowls, ensaladas y tostadas de aguacate, se sirve a diario entre las 10 de la mañana y las 6 de la tarde. Los fines de semana hay dos opciones más: tostadas francesas con canela y bacon y huevos cocidos con yogurt, mantequilla de chile y chermoula de lima.
Además de cafés –chai latte y matcha latte entre otros- también hay deliciosos smoothies y zumos variados que van cambiando a diario. Los postres, firmados por Lexie Smith, van mucho más allá de los ingredientes tradicionales e incluyen brownies de chocolate y tahini, galletas de cúrcuma y albaricoque y tarta de aceite de oliva. Asimismo, hay especiales del día por los que merece la pena preguntar.
Los rumores apuntan a que la residencia de Becerra en el Café Henrie está encaminada a un puesto más permanente y sería un grave error dejarla ir.
116 Forsyth Street, 10003, NYC
Lunes a martes: 8.30 a 18.00
Miércoles a domingo: 8.30 a 23.00
Precio: entre 6 y 20 euros
Texto y fotos: Mónica R. Goya