Los morteros son utensilios de cocina que llevan miles de años con nosotros ayudándonos a conseguir platos únicos. Instrumentos rústicos y artesanales que siguen sobreviviendo en las cocinas a pesar de la introducción de otros utensilios electrónicos por el sabor que aporta esos majados a los platos.
Casa Mortero, hace referencia a ese utensilio, y es que este instrumento es el ejemplo perfecto que ilustra lo que se sirve en este restaurante: platos de toda la vida traídos al S. XXI.
A pesar de que las puertas de este restaurante se abrieron en Septiembre del 2020, Casa Mortero se lleva cocinando durante muchos años en la cabeza de Pedro Gallego, el chef de este restaurante. Un proyecto que nació de un sueño y fue evolucionando hasta hacerse realidad.
Casa Mortero es una casa de comidas, en concreto la casa de Iluminada, la abuela de Pedro y quién durante muchos años cocinó platos de toda la vida en su día a día para alimentar a su familia. Pedro recogió parte de ese recetario castellano y lo actualizó con técnicas actuales. Su objetivo, en cada uno de los platos, es tratar lo mejor posible cada producto para sacarle todo su sabor. Por esa razón, en Casa Mortero cocinan todo a fuego lento, utilizando siempre Aceite de Oliva Virgen Extra y con las cantidades exactas para mantener la esencia de las recetas.
Su carta es acotada, con platos elaborados pero en los que se transite la sencillez. En su carta destacan opciones como la patata a la importancia, con kokotchas de bacalao, huevo frito y papada curada, o los torreznos, uno de sus platos estrella y que son servidos con patatas meneás de Salamanca y majado de pimentón. Otro de los platos que conquista a todo el que lo prueba es el arroz de pato con alcachofas, torta del casar y pieles crujientes, o los callos a la madrileña con pata, morro y cecina muy curada. Sus postres también llaman la atención, pero entre sus cuatro opciones, el pódium se lo lleva la tarta de queso cremosa con helado de toffe.
Para acompañar estos platos, Casa Mortero también cuenta con una buena bodega que marida a la perfección con las diferentes opciones de su carta.
El local acompaña a su cocina, un espacio sencillo y natural con luz indirecta y que trasmite esas casas de comida tradicionales y austeras donde cada elemento es necesario. Arcillla, madera o barro son los materiales utilizados en su decoración, elementos que inspiran volver a la tierra y potenciar la naturalidad del espacio. Con todo ello, han conseguido crear un espacio tranquilo y cómodo dividido en dos zonas, la barra (con mesas altas) y la sala principal.
Sin duda, Casa Mortero es un restaurante tradicional, cuyos platos te invitan a untar pan, a trasladarte a la niñez y volver a sentirte como ese niño que no quiere crecer y que disfruta cada día comiendo la comida de su infancia. Un espacio perfecto para ese encuentro intergeneracional donde padres e hijos se sientan alrededor de la mesa para saborear platos que han marcado momentos especiales de su vida.
Dirección: Calle de Zorrilla, 9, 28014 Madrid
Precio medio: 35€
Horario: De lunes a jueves de 13:00 a 23:30 horas. Viernes y sábado de 13:00 a 24:00 horas. Domingos de 13:00 a 17:00 horas
Texto: Elena R. Feijóo
Fotos: Nacho Alcalde Ruiz