Cilindro fusiona la cocina asturiana y criolla que tan bien conocen sus propietarios

Los creadores del exitoso Ronda 14, tanto en Madrid como en Avilés, el chef peruano Mario Céspedes y su mujer Conchi Álvarez, han vuelto a las andadas. Acaban de abrir Cilindro, un restaurante de fusión entre la cocina asturiana y la criolla.

Si en Ronda 14 la impronta de la cocina peruana era mayor, en Cilindro la que manda es la asturiana, eso sí, aceptando giros y variaciones en clave criolla. El restaurante cuenta con dos espacios, la zona de arriba con mesas altas y una gran barra en la que quieren dar protagonismo a los piqueos, y además, un comedor principal con mesas bajas y capacidad para unos 70 comensales, junto a un reservado para grupos de hasta 20 comensales.

¿Y a qué se debe el nombre? Al cilindro, por supuesto. Esto no es otra cosa que una forma criolla de cocinar en un horno de brasas. Aquí utilizan el tan preciado horno Josper, como alma y motor de las recetas del restaurante. La carta, donde no se distingue entre primeros o segundos, está pensada para compartir, ya que en la gran mayoría de los platos, existe la posibilidad de pedir medias raciones. ¿El fin? Poder probar más cosas en cada visita.

Para Cilindro, Mario Céspedes ha incluido muchos guisos potentes del recetario patrio y los ha fundido a las mil maravillas con los toques criollos. Resultan indispensables sus ceviches, que aquí son mucho más auténticos utilizando ingredientes andinos, pero sin duda, lo más interesante son los platos que han fusionado entre dos gastronomías tan distintas. Por ejemplo, el caso de un torto de maíz, estandarte de la cocina asturiana, que aquí sirven de forma más sutil y relleno de rabo de toro, salsa criolla y rocoto. También nos quedamos con el rollito asturiano, concebido en clave de nem asiático, con hoja de roble como base y relleno de un guiso de vaca vieja, chorizo, especias orientales y salsa chifa. Para mancharse las manos y disfrutar como un enano. Si pensamos en las recetas criollas de la carta, no podéis dejar de probar la causa de langostino, el ají de pollo ahumado y un muy acertado pulpo con guiso de olluco y aceituna botijo. Par un final feliz, pide en mochi de lúcuma y granizado de fresa. Casero y delicioso.

En Cilindro hay mucho talento amigos… ¡Reserva ya!