Este lugar en el límite de las colonias San Rafael y Santa María de la Ribera se viste de rosa para servir cochinita pibil en sus múltiples presentaciones. ¡En taco, en torta, en panucho, en chilaquiles y hasta en hamburguesa! Su ubicación estratégica en una zona de paso invita a los transeúntes a repostar gasolina para seguir en su carrera.
Anauar Maauad, artista y fundador del programa sin ánimo de lucro de residencias artísticas Casa Maauad, es un apasionado de la gastronomía yucateca y en concreto de la cochinita pibil. Pibil, cuya traducción en maya es «pib» y significa «horneado en», es un término que se aplica a los alimentos cocinados al calor de las brasas en un agujero en la tierra a modo de horno. Anauar encontró a una persona que mejoraría su receta y tras diseñar un contexto diferente para una receta tradicional de origen prehispánico, nació Cochinita power. Es, sin duda, una óptima alternativa a las comidas en los mercados donde poder comer rico, sentado, a un precio muy asequible y en un lugar limpio y coqueto.
El establecimiento atrae a un público de lo más variopinto, desde estudiantes de bachillerato hasta parejas y jubilados. Todos tienen algo en común: su tez está bañada con luz rosa y comen cerdo adobado en achiote cocinado al carbón durante 10 horas. El resultado es una deliciosa y condimentada carne que se deshace en la boca, acompañada de cebolla morada en naranja agria y chile habanero. Cada una de las salsas merecen su degustación y son a base de chile habanero, unas con cebolla caramelizada, otras con tomate verde. El enorme vaso de agua fresca del día es un contrapunto muy apropiado para bajar el power de los efectos del habanero. Dos propuestas que rompen con su clásica receta y sorprenden muy favorablemente son la hamburguesa y los chilaquiles. La gringa, con tortilla de harina y combinada con queso, es más que un tentempié delicioso. En la carta no fallan los tacos o los panuchos para aquellos que quieran hacer una inmersión totalmente yucateca. Y para los más hambrientos o con muy buen diente, la torta jumbo es una suculenta opción. Habrá que apostar antes para ver si logran acabársela. Para cerrar el viaje a Yucatán, nada mejor que unos plátanos machos al vapor con crema. Y en un abrir y cerrar de ojos, uno sale con la sonrisa puesta, el estómago lleno y el bolsillo también.
Definitivamente, vale la pena desplazarse a la popular y cada vez más en boga colonia San Rafael para conocer este único templo de la cochinita pibil. Una atractiva referencia de bueno, bonito y barato. Están por abrir su tercer local próximamente. Seguro será como mínimo igual de original, divertido y pícaro que el anterior. Y además, sin pretensiones. ¿Qué más se puede pedir?
Ribera de San Cosme esquina con Altamirano
Colonia San Rafael, Ciudad de México
Horario: Lunes a domingo de 12h. a 22h.
Horario: Lunes a viernes de 13h. a 21h. / Sábados y domingos de 10h. a 19h.
Fotos y texto: Livia Arroyo