Pocas veces, muy pocas veces, cuando entras a un local nuevo, sea un bar o un restaurante, tienes la sensación de emoción de abrir un regalo como cuando eras pequeño, esa excitación hace que la expectativa sea cada vez más grande, y si al final, cuando abres ese regalo, encuentras que es lo que esperabas, la emoción y la satisfacción te llenan de un forma apabullante. Eso pasa al entrar en Dr. Stravinsky, con el trabajo de Antonio Naranjo en la barra (anteriormente en la coctelería noruega Himkok), y de Enric y Lito como instigadores del proyecto, verdaderos agitadores de la Coctelería en Barcelona.
Dr. Stravinsky nace con el objetivo de tener el máximo control de sus recetas, desde contar con su propia Ginebra, a hacer sus propios fermentados, su propia tónica o ginger beer. Esto da muchísimo trabajo y a su vez te genera una ligera incertidumbre a la hora de poder asegurar stocks, y como pasa con las cosas realmente artesanales, a veces, se acaban. Actualmente están al 40% del control absoluto de la producción del bar que salga de sus elaboraciones o alteraciones, y su idea es llegar al 80% o 90%. Pensad en la de bares que ni si quiera descongelan purés de frutas, ni los hacen ellos (y optan por productos industriales), y aquí Antonio y los suyos hacen sus propios fermentados. Sin duda aquí hay mucha pasión, y sobre todo mucho trabajo previo. Cuando hablas con Antonio y su equipo, o con el propio Lito, y ves ese brillo en los ojos, te das cuenta que para ellos este aprendizaje y evolución está siendo sobre todo muy gratificante. Ese salario emocional tan grande que es impagable.
Al entrar a Dr. Stravinsky os parecerá que estáis en una rebotica, con una decoración muy cuidada y personal, llena de botellas con sus propios brebajes, tarros con maceraciones, bitters, etc. Pero casi todo lo que veis, son productos que se utilizan en la preparación de cada uno de los cócteles, no es solo para quede bonito.
Es evidente que hay un concepto claro del local, pero esta imagen, esta actitud no es impostada. Las alteraciones que tienen los destilados (que se maceran, se filtran en frío, se re-destilan) van a favor de unos cócteles muy ricos en matices, con un equilibrio a veces casi extremo. Se nota que Antonio ha trabajado fuera de nuestras fronteras, y tiene ese punto, ese toque tan preciso, que hace que nos quitemos el sombrero. Alberto no está solo, tiene a dos primeras espadas con él, como son Alberto Fernández y Yeray Monforte. Con ellos, seguro que todo es más fácil.
Es evidente que no hacen su propia cerveza, pero si la compran a una cervecería artesana, y el vino, biodinámico. No encontraréis refrescos de Cola de ninguna marca, y a veces, la tónica se acaba. Pero siempre, os ofrecerán una alternativa que os encantará.
Por último, queríamos hablaros de la señora Josefa, una vecina que frecuenta mucho el local y que reside justo al lado del Dr. Stravinsky. Si tenéis curiosidad preguntad por ella a los bartenders, seguro que os encantará escuchar sus historias.
Carrer dels Mirallers, 6, 08003 Barcelona
Horario: de martes a jueves de 19h a 2:3oh, viernes y sábados de 19h a 3h, y domingos de 19h a 2:30h
Texto: Mauri Jiménez
Fotos: Magdalena Puigserver