Humilde, apasionado de su trabajo y sin ningún afán de protagonismo, entrevistamos al actor Jaime Lorente, fanático absoluto del café, los huevos rotos con jamón y de la gastronomía de su tierra, Murcia.
Su debut como actor comenzó hace unos años al entrar a formar parte de elenco de la archiconocida serie El secreto de Puente Viejo. En ella interpretaba a Elías Mato, un químico muy simpático y con un gran sentido de la justicia. Sin embargo, fue la superproducción de Antena 3 La casa de papel -y una grandísima puesta en escena, todo hay que decirlo- lo que llevó a Jaime Lorente a convertirse en uno de los personajes (y secuestradores) más queridos de la televisión. Y ojo, porque no sólo de la española sino la del resto del mundo. Y es que desde que la serie se incorporó al catálogo de Netflix su éxito no ha hecho más que crecer, y eso que terminó el pasado mes de noviembre. Pero la resaca, según le preguntamos, todavía le dura. “La verdad es que ha sido la más grande de mi vida. Nosotros hicimos la serie, se emitió y sabíamos que la iba a comprar Netflix. Pero cuando la subió a la plataforma, de repente, fue como un ‘boom’. Esta mañana venía leyendo un tweet que decía que era la serie más ‘maratoneada’ de Netflix en Estados Unidos y yo, ¡uau!”, explica sorprendido.
Humilde, apasionado de su trabajo y sin ningún afán de protagonismo, lleva unas semanas rodando el segundo proyecto de ficción de Netflix en España, Élite, “una serie que, a través del asesinato de una chica, muestra dos mundos muy diferentes- el de la gente de la élite, muy rica, y el de la gente pobre- que conviven en un colegio muy exclusivo”. En ella, Jaime interpreta al hermano mayor del actor Miguel Herrán, que da vida al protagonista, y que se suma al reparto de la serie junto con María Pedraza, también actriz y compañera de ambos en La casa de papel. Un ‘come back’ con el que se siente muy agradecido. “Una de las cosas que más me apasiona de mi trabajo, a nivel artístico, es poder ‘pegarme’ viajes muy distintos con personajes muy diferentes entre sí. Y a nivel humano es ese encuentro continuo de gente con la que muy probablemente te acabarás despidiendo y a la que quizá nunca vuelvas a ver. Son momentos muy intensos que duran, por ejemplo, dos meses en los que convives con las mismas personas todos los día. Para mi son como pequeñas vidas”, comenta.
Aunque lo de actuar se le da de maravilla, lo de ser actor fue más una casualidad. “Iba a estudiar derecho, filosofía o filología hispánica. Arte dramático no estaba entre mis prioridades”. Pero hizo las pruebas y las aprobó. Y disfruto tanto haciéndolas que, de repente, vio la luz. “Disfruto mucho con mi profesión pero no me gusta mucho todo el mundo del falso posturo, todo ese mundo que se genera alrededor del actor y del artista. Creo que nosotros tenemos que trabajar, dedicarnos a contar historias y no a vivir por encima de nuestras posibilidades”, concluye.
Además de desvelarnos algún que otro detalle de su nuevo proyecto, aprovechamos la entrevista que le hicimos en el Gourmet Experience de Serrano 52 para preguntarle por sus gustos culinarios a la hora de sentarse a la mesa. Y esto fue lo que nos dijo.
¿Un restaurante que nos recomiendes?
Como buen murciano me quedo con La Pequeña. Es un restaurante de cocina de producto que es espectacular. Y en Madrid hay un sitio en La Latina que me gusta mucho que es llama La Cueva de La Tina. Es un sitio de tapeo, que a mi me encanta, pero un poco más desarrollado. Pero también tiene cosas de cocina con olla que me gusta mucho. El dueño es encantador y el sitio muy bonito.
¿Y un plato?
La olla de cerdo. Esto no lo va a conocer nadie pero es uno de mis platos favoritos. Es tipo de Murcia y es una especie de potaje con cerdo, morcilla… ¡Es una bomba! También me flipan las migas. Y luego, unos huevos rotos con jamón me los gozo. Para acompañar la comida me gusta mucho el vermut
¿Podrías elegir un producto fetiche?
La verdad es que tengo dos: la cafetera italiana, porque soy fan absoluto y me gusta prepararme un buen tanque de café, y después el rallador, porque desayuno todos los días tostadas con tomate, sí o sí, y es insustituible.
¿Y un trago?
Soy muy de vino de Ribera y Estrella Levante. Como puedes ver yo la patria la llevo por bandera.
Si nos invitaras a cenar a tu casa, ¿qué nos cocinarías?
Por supuesto no faltaría una tabla de queso, jamón y almendras fritas, unos dátiles con bacon que me pierden, un salmón con costra de mostaza, que es una de mis cosas favorita. Y de postre leche frita o tarta de queso, pero seguramente leche frita.
A la hora de salir a cenar con amigos, ¿cómo te gusta ir vestido?
La verdad es que muy parecido al look que llevo porque soy de zapatillas de toda la vida. Y además soy de ponerme unas y hasta que no las reviente no las cambio. De mis vaqueros, mis camisetas básicas y de mi chupa de cuero que puede cambiar entre una chupa o un abrigo largo. Comodidad ante todo.
Jaime lleva cazadora biker tostada, de Fórmula Joven; camiseta básica gris de manga corta, de Easy Wear; vaqueros relax azul, de Easy Wear y zapatillas deportivas blancas con cierre de cordones, de Green Coast.
Texto: Ana María Clemente
Fotos: Nacho Alcalde Ruiz