La calle de la Bola está infravalorada. Se vea por donde se vea solo tiene cosas buenas y parece ser que ya no le importa a nadie. Y eso no puede ser. Por un lado se encuentra a dos pasos del Palacio Real y la Plaza de Oriente y el Senado, convirtiendo sus paisajes en unos de los más bellos de Madrid. Por el otro, está plagado de restaurantes que no tienen desperdicio: uno de los mejores restaurantes de cocido madrileño y su emblemática fachada roja; un buffet coreano de los de hincharse hasta el borde de la fatiga y a su lado, un coreano-japonés de los que cuidadito con llegar a hora punta porque no comerás en tu vida. Pero hay uno más que le da un caché extra a la calle de la Bola, una taberna familiar abierta desde hace treinta años y cuyo nombre hace honor a un pan de Antequera: El Mollete.
Esta taberna nunca sale de la lista de favoritos de los que se conocen la ciudad como la palma de su mano y se mantiene como un lugar al que recurrir una y otra vez. Se conforma por dos plantas minúsculas y románticas con manteles a cuadros en los que te codeas –literalmente- con los comensales de al lado. Tomás –el dueño- recibe a los clientes, los sienta, toma nota, sirve e incluso se toma la libertad de sentarse con sus clientes y escuchar sus comentarios sobre la cena, o ya puestos, de la vida en general. Úrsula es esposa de Tomás y única persona dentro de la cocina y es quien saca esos platos caseros que en cero coma se postran en la mesa. Los suyos son platos sencillos pero muy sabrosos como unos saquitos de queso de cabra, bombones de morcilla, atún rojo, huevos rotos o alcachofas con foie. La carta no ha cambiado con el paso de los años y seguramente te encuentres platos que siguen con ellos desde que abrieron. Curioso como hay ciertas cosas que por más que pase el tiempo no pierden su sabor.
Tomás lee las sugerencias del día y es un acierto seguro apostar por ellas porque lo que ve en el mercado ese día para el plato que va. Lo mismo en el menú del día, producto fresco y de temporada rematado con postres caseros.
Como todo restaurante que lo borde tiene una trampa, que sin reserva no comes porque el local es diminuto y la demanda supera al tamaño del local. Avisados estáis.
El Mollete
915477820
Lun – Sáb: de 10:00 a 17:00 y de 20:00 a 00:00
Precio medio: 20€
Texto: Paula Móvil
Fotos: Maite Ojer