“Para hacer un buen pan se necesita harina, agua filtrada, sal y mucha paciencia” nos cuenta François. Su sueño es inspirar a granjeros catalanes a producir trigos antiguos para que el pan contenga más nutrientes, dure más tiempo y no dañen la tierra. Esta forma de cocinar, es una modo de producción que proviene de Francia y progresivamente  se está afianzando en España, que en los años 60 se acostumbraba sembrar trigo de diferentes variedades con raíces de hasta dos metros de longitud, lo cual permitía tomar las propiedades de la tierra.

Esta filosofía es la base de Origo, el pan es amasado a mano, con 17 horas de fermentación, y sobre todo, con  mucho amor por el producto. Todo esto hace la diferencia.

Aquí encontrarás variedades de trigo como  montcada, khorasan, espelta, centeno, forment y escaña por nombrar las más conocidas a  base de masa madre. Con el objetivo de abrir las puertas para vender pan a la gente del barrio, la pasión, la dedicación, y el cuidado en la elaboración, hacen que esta materia prima sea un motivo de degustar.

El dato curioso es que François solo trabaja con una persona. Abren de martes a viernes a partir de las 17:00hs a 20:30hs, y los sábados de 10:15hs a 14:00hs. Es una de las pocas panaderías, por no decir la única, que produce a base de cien por ciento montcada, variedad antigua de Cataluña.

Como  decía  Escoffier, “la simpleza no quita la belleza”. Origo es un ejemplo de que lo simple es rico, fresco, natural y nos llena el alma.