Enric Alepuz, músico y diseñador, es amante de la música, el arte y la gastronomía. Es fundador y encargado de la parte artística de Tattoonie Temporary Tattoos, una marca de tatuajes temporales que colabora con artistas de todo el mundo. También ejerce de batería en los grupos Tórtel y Gener. Vive en pleno corazón de València y disfruta cocinando y explorando sabores de cualquier parte del mundo. Hoy nos hace un menú con influencias internacionales acompañado del vino Celeste Crianza de Bodegas Torres.
¿Qué nos vas a cocinar hoy? ¿Por qué?
En primer lugar, una ensalada dulce de pepino con verduras encurtidas y cilantro. Y otra ensalada de cous-cous especiado con sardina ahumada. Después, una sopa de leche de coco al curry rojo con setas shitake, rebollones y bimi, junto a una merluza con tempura y verduras al estilo Kung Pao. De postre, unas granadas con zumo de naranja. Lo he cocinado porque me gusta jugar con la comida oriental, no creo que lo haga de maravilla pero sé que con los amigos a los que he invitado lo vamos a pasar bien y es lo importante. Además, desde hace muchos años suelo hacer compras en supermercados chinos y en casa siempre tengo algún producto loco. Soy muy pro-comida valenciana y me encanta hacer paellas pero hoy me apetecía cocinar algo exótico.
¿Cuál crees que es el secreto de su elaboración?
No creo que tenga ningún secreto, no es una preparación difícil. Lo bonito es jugar con el picante de menos a más y que el producto sea bueno. He elegido los productos pensando tanto en los sabores como en los colores. ¡Alegría!
¿Dónde sueles ir a comprar?
Tengo suerte de vivir muy cerca del Mercat Central de València, así que cuando tengo mañanas libres voy. Cuando no puedo, voy al CoAliment de La Plaça de Vicent Iborra o a la frutería Palomares del Carrer de Dalt. Aunque mi debilidad son los hornos, tengo unos cuantos en mi rutina y en cada uno de ellos compro una cosa en concreto, de cada uno me llevo lo que para mí es lo mejor. El Forn de Conxín, San Nicolás, Alfonso Martinez, San Pablo, l’Obrador del Carme… Y el Forn de Fergo cuando estoy mi pueblo, Benifaió.
¿Qué recuerdos familiares tienes en torno a la comida?
Muchísimos, en mi familia han sido mucho de cocinar y de buen comer. Recuerdo el arroz al horno y los caracoles de mi abuela Isabel, las tartas de almendra de cumpleaños de mi abuela Paquita, las paellas y all i pebre en el bar de mi tía Adela en el Romaní en plena Albufera, las bravas de mi abuelo Enrique, las ensaladas de mi abuelo Jaume y sus tomates de otra galaxia, los gazpachos manchegos de mi madre, la fideuà o la paella de caldo del puchero (ojo a esta maravilla de comida en peligro de extinción) de mi padre, los buñuelos de calabaza o els “encaraets” del horno de Pepe y Reme donde me he criado (de ahí mi locura con los hornos). Todas estas comidas las tengo grabadas y podría saborearlas ahora mismo, son muy especiales y forman parte de mí.
Explícanos la mejor comida/cena que recuerdes
No recuerdo la mejor comida, la verdad. De restaurantes caros o de estrella tampoco he salido pensando que era la mejor comida de mi vida, creo que he tenido mucha suerte de haber comido muy bien siempre y con productos de temporada de mis campos o de familiares. Y me he rodeado de buenos cocineros. Podría responder con un anécdota. De pequeños, mi hermano y yo estuvimos enfermos casi dos semanas y sólo podíamos tomar suero; perdimos muchos kilos. La primera vez que pude comer una plato de hervido fue tan maravilloso que aún lo recuerdo.
Canción o tatuaje que te inspire a la hora de cocinar
Me gustan mucho las listas que hacen los de Reverberation para cocinar o hacer tareas de casa, me dan muy buena onda y descubro canciones buenísimas. Tatuaje, me hace ilusión llevar puesto cualquier Tattoonie nuevo: hoy para cocinar llevo unas flores ilustradas por Belén Segarra.
Fotos: Laura Torres