La punta de lanza del grupo Teresa Carlos debuta en Madrid, concretamente en Azca, en pleno corazón financiero de la capital, con los mismos mimbres que le han convertido en todo un referente en Barcelona durante años. Aferrados a las tres ‘eses’: sostenible, sano y sabroso, el grupo despliega con Flax & Kale Street una propuesta de healthy fast casual, desmitificando el concepto ‘fast’ de la idea de poca calidad.
Así aterriza este flexitariano que ha hecho de su versatilidad una de sus grandes armas. Tanto para eat-in como para take away o delivery, Flax & Kale Street demuestra cintura para adaptarse a los ritmos frenéticos de la ciudad. Un hecho que no tiene por qué estar reñido con comer bien y sano. Algo que queda patente en la marcada vocación vegetal de la cocina de este restaurante, donde el 80% de los productos son de origen vegetal y las únicas proteínas animales que entran en la carta proceden de pescados azules sostenibles.
También para derribar barreras y prejuicios gastronómicos, Flax & Kale ha hecho una apuesta por el I+D en el que convertir productos vegetales en alternativas veganas a la carne, ofreciendo texturas y sabores muy parejos, capaces de descolocar hasta a los más carnívoros. Es el caso del ramen, los tacos o la hamburguesa, donde las carnes veganas toman el relevo de lo tradicional, capaces de dejar descolocadas a las papilas gustativas de más de uno.
Con un horario casi non-stop que comienza a las nueve de la mañana, Flax & Kale además apuesta por comenzar el día de manera verde con sus desayunos. Yogures, smoothies, zumos cold-press y tostadas, donde el aguacate no falta, dan el buen despertar a los madrileños, que además en fin de semana cuentan con la posibilidad de un brunch 100% vegano -huevos benedictinos incluido-.
La propuesta, al menos de momento, se consagra entre flexibowls y flexiplates, donde se combinan los nutrientes y el sabor en una sinfonía cromática con la que reconciliarse con la cocina vegana. Guiños a Oriente, tanto al Lejano como al Medio, o a los pokés hawaianos, sirven como hilo conductor de esta carta divertida y diversa, con hasta ocho bowls distintos. Una variedad que también tiene su relevancia en los flexiplates, donde a la hamburguesa, el ramen y los tacos se suman el atún y el salmón, así como el arroz y un curioso curry de estilo indonesio con calabaza. A su lado, y literalmente, las guarniciones, donde resulta complicado resistirse a sus hummus caseros, a su coliflor asada o a los rollitos de berenjena.
En el trago, fieles a su esencia, zumos cold-press (hasta 14 tipos distintos) preparados diariamente por ellos, distintas kombuchas, smoothies y como no, café de especialidad. Perfectos para acompañar de con los helados, yogures o la pastelería casera, gluten free y libre de azúcares artificiales con la que poner el colofón goloso a una aventura vegana que promete conquistar Madrid a base de sabor.
Dirección: Paseo de la Castellana, 89.
Horario: Desayunos de lunes a viernes de 09:00h a 12:00h y sábado y domingo de 10:00h a 17:00h. Comidas y cenas de lunes a domingo de 12:00h a 17:00h y de 9:00h a 22:00h.
Ticket medio: 15€.
Texto: Jaime de las Heras Martín.
Fotos: Nacho Alcalde Ruiz.
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