Las amas, las quieres y las adoras. ¿Qué sería de tí sin una hamburguesa?
El boom hamburguesero ya lleva un buen rato en el panorama madrileño, de hecho costó un poco que arrancara pero al mezclarse con el concepto de diner al más puro estilo de los años 50 logró encajarse con más soltura dentro de las mentes y los bolsillos de aquellos que buscaban algo diferente a la hora de comer bien. Inmediatamente después de cotizarse al alza, las hamburguesas que subieron como la espuma tuvieron un pequeño bajón entre tanto asiático y comida callejera. Pero el impero de la hamburguesa contraatacó y volvió para hacerse un hueco estable como el plato de confianza de muchos.
En 2006 abrió sus puertas uno de los primeros templos de la hamburguesa americana en Madrid que se propuso despojarla de la etiqueta de fast food y moldearla para convertirla en un bocado gourmet, educando así, a un público que estaba acostumbrado a comerla solo cuando el hambre de resaca apretaba. La fórmula fue sencilla: carne y panes ecológicos, verduras frescas y dándole alegría a cada mordisco con combinaciones que iban más allá del queso cheddar y el bacon. La idea la tuvo el canadiense afincado en Madrid Arnaud Barcelon con un local bajo el nombre de Home Burger Bar en la calle Espíritu Santo (ahora cuenta con tres locales más), el cual desde hace diez años, se ha logrado convertir en uno de los favoritos de los malasañeros. Junto con Alfredo’s, Home Burger se convirtió allá por 2006, en una de las únicas hamburgueserías donde había que reservar para pillar mesa.
Queso de cabra, roquefort, pimientos rojos confitados, salsa BBQ, aguacate, crema agria, cilantro o salsa picantes… aquí lo de sentarse a escoger una hamburguesa no es fácil, pero opciones hay (y muchas) para satisfacer a cualquiera. Desde el vegetariano que puede optar por la de garbanzos y verduras hasta al que prefiere una sándwich de pollo (de corral, claro está) con chipotle y aguacate para satisfacer su hambre más carnívora.
Para renovarse y darle un nuevo aire a sus ya archiconocidas hamburguesas, Home Burger ahora también rinde homenaje a las tabernas modernas japonesas sustrayendo el ritual de la cultura asiática para convertirlo en hamburguesa. Lo curioso es la forma como lo hace: con tres diferentes piezas de una misma vajilla diseñada por Nuria Blanco y pintada a mano. Cada una de ellas se presentan en la mesa de forma coordinada y estructurada, presentando por un lado, un pan con sésamo negro de 170 gr de cola de langostinos frescos pelados y marinados con una mayonesa con base de sriracha (para no parar de rebañar) y lechuga aliñada con vinagre de arroz y cebolla roja. Para acompañar, y terminar de completar el puzzle que componen los tres platos de la vajilla (y que al juntarlos crean un juego visual), pepino marinado con sésamo y batata con flor de sal, pimienta, ajo y perejil. ¿Se te antoja? Pues avisado quedas que hay que reservar con un día de antelación la hamburguesa para que asegurar su frescura.
Horario: de lunes a jueves de 13:30-16:00 y de 20:30 a 24:00. De viernes a domingo de 14:00-17:00 y de 20:30 a 24:00.
Texto: Paula Móvil
Fotos: Marc Ortiz