Las pinturas de Jacqueline Poirier son tan realistas que parece como si del plato saltaran a la realidad.
Esta chica de Toronto se dedica a darle color y diseño con las manos a unos platos que luego se exhiben por las cenas de algún que otro hotel de lujo, porque para qué te esfuerzas en crear una obra de arte en un plato si luego no lo utiliza nadie.
Entre toda su paleta de colores se pueden encontrar animales, retratos, celebridades, comida, y por supuesto se recrean conversaciones muy interesantes sobre lo que de repente se ve reflejado.
Toda la pasión que Jacqueline le pone a su trabajo, se nota en los resultados. Ha pintado para el Festival Internacional de Cine de Toronto, en revistas como National Post, Elle Magazine, Canadá AM y ha salido en varios programas de televisión y por todo el mundo.
Hasta ahora ha pintado más de 1500 piezas, y aquí os enseñamos algunas!
Texto: Alba Llamazares