Iván Morales y Álvaro Castellanos. Seguramente ya les conozcas por ser los creadores de una de las paradas imprescindibles en la zona del Retiro, Taberna Arzábal. Pero ¿sabías que también tienen una taberna japonesa en el mismo barrio? Kirikata nació a pocos metros de la casa madre, en un local donde la propuesta japonesa y la coctelería, se daban de la mano para agasajar a todo visitante. Pero ha sido ahora, hace apenas un mes, cuando han mudado el local para darle una vuelta de tuerca.
Ahora están en Doctor Castelo, 2. Te suena esa ubicación, ¿verdad? Si has sido fiel desde el principio a este dúo dinámico de la escena madrileña, sabrás que ese mismo local nació la Taberna Arzábal primigenia. “Tiene algo romántico el volver al sitio donde todo empezó”, apunta Iván. Y es que ahora, la taberna japonesa del barrio gastronómico de Madrid, el Retiro, claro, crece y revisa su propuesta. ¿El principal motivo del cambio? Poder cocinar. Si el anterior Kirikata estaba centrado en la barra de sushi, el nuevo pone las miras en expandirse un poco más por las recetas niponas más deliciosas. Han ganado en espacio de cocina, motivo por el que la carta ha podido crecer sustancialmente, llegando a equiparar el número de platos calientes con los de corte frío. Hasta han creado su propio animal mitológico, una especie de recreación del atún toro con cabeza de gamba, cuerpo de toro y cola de atún, como emblema y logo del restaurante.
Al frente de los cuchillos, el sushiman Luis Sánchez, pieza clave del grupo Arzábal y del engranaje de Kirikata. Allí, en una barra a la vista del comensal y con capacidad de hasta 12 puestos, preparan nigiris de toro con caviar Osetra, de gamba roja en dos temperaturas, de atún con tartar de tomate o de huevo de codorniz con trufa, además de makis especiales (de softshell king crab, anguila o carrillera cinco especias y reducción de vino Terrible, entre otros) y tartares, tatakis y usuzukuris. Pero sin duda alguna, las aportaciones a este nuevo Kirikata, son los platos calientes y la robata japonesa de gambas, vieiras, albóndigas de Wagyu, edamame picante y del codiciado ‘black cod’. ¿Mas hits de la carta? El ramen de carabinero, el bao de costilla de cerdo ibérico con salsa hoisin y el katsudon de presa ibérica. Y de postre, mochis con helado de té matcha, la torrija de Arzábal o coulant de chocolate.
¿Te cuesta decidirte ante tan magna propuesta? Ponte en sus manos con los nuevos menús degustación, Omakase medium y Omakase large, de 65 y 85 euros respectivamente. Ambos incluyen parte de la propuesta caliente y un festival de nigiris y pescados.
Mención aparte merece la extensísima propuesta líquida con más de 460 referencias entre cervezas japonesas y patrias como la Estrella Damm, vinos, sakes y champagnes de todas partes del mundo. Bodega que además comparten con su vecina Arzábal.
Calle Doctor Castelo, 2. Madrid
Teléfono: 91 435 88 29
Precio medio: 45 euros. Menú Omakase medium 65 euros y menú Omakase large 85 euros.
Horario: de lunes a sábado de 13:00h a 17:00h y de 20:00h a 02:00h.
Texto y texto: Macarena Escrivá