La guisandera de Piñera es un restaurante de cocina asturiana que homenajea a las guisanderas, las cocineras asturianas de antaño que han sabido guardar y mantener hasta nuestros días las recetas tradicionales de su gastronomía. Y en concreto, el homenaje, se centra en la madre de Manuel y Tino marrón, dos hermanos que junto con la hija de este último, María José, han abierto las puertas de este restaurante para mantener ese recetario tradicional y familiar que tan buenos recuerdos les trae.
Su propuesta repasa los clásicos de la cocina asturiana, con algunos toques creativos, y ensalzando los guisos a fuego lento para conseguir potenciar el sabor. El espacio también transmite esa calma y relax que se percibe en sus platos. Un espacio con un ambiente acogedor en el que la madera y los toques verdes de la vegetación en paredes y techos convierten la sala en un local en el que relajarse y saborear cada plato.
En la carta de La Guisandera de Piñera encontramos platos cocinados a fuego lento. Para abrir boca encontramos platos como los buñuelos de brandada de bacalao, las croquetas de picadillo o el pulpo de Tapia de Casariego a la parrilla con crema de garbanzos. Podemos continuar con uno de sus platos de verduras y hortalizas como las alcachofas confitadas con jamón ibérico o la cebolla asada rellena de bonito. Como plato principal, en La guisandera de Piñera se encuentran platos de cuchara como la fabada asturiana, las verdinas estofadas con mariscos o la caldereta de pescados y mariscos al estilo Lastres.
Otras de las recetas que no dejan indiferente son sus pescados, opciones como el pixín del Cantábrico con langostinos, el bacalao al pil-pil o la merluza en salsa verde con almejas y toque de sidra conquistan a todos los paladares. Para los amantes de las carnes el rabo de toro guisado al vino tinto, las mollejas de cordero lechal glaseadas con patatinas o el cachopo asturiano son solo algunas de las opciones que harán las delicias de los más carnívoros.
Para los amantes del dulce, en la carta de este restaurante destacan postres como el arroz con leche, la tarta fina de manzana o la tarta cremosa del queso del norte. Postres perfectos para terminar una comida en la Guisandera de Piñera con mucho sabor a Asturias.
Para acompañar todos los platos, en la Guisandera de Piñera también cuentan con más de 300 referencias de vinos, con gran presencia de vinos asturianos, especialmente de la Denominación de Origen Protegida de Cangas.
La Guisandera de Piñera es ese restaurante en el que reservar para una comida y cena en la que quieras disfrutar de la tradición y de la buena cocina.
Dirección: Calle de Rosario Pino, 12, 28020 Madrid
Horario: de lunes a sábado de 13:00 a 23:30 horas; Domingos de 13:00 a 16:00 horas
Precio medio: 50€
Texto: Elena R. Feijóo
Fotos: Cedidas por el restaurante