Hoy va de huevos, ¡y menudos huevos! Ese clásico de toda noche en casa de la máma, variopinto y sabroso con una receta propia de cada uno. Sinónimo de debate, existen mil formas de cocinarla, con o sin cebolla, con chorizo o a base de chips… Sea como sea, somos fanáticos de un buen pincho de tortilla y un pedazo de pan para rebañar.
El incondicional de toda barra de bar, una receta generacional de innumerables versiones homólogo a climax gastronómico para todo tipo de paladares.
Aquí os dejamos algunos bares donde hacernos hueco en su barra, hincar el codo y devorar una tortilla de lagrimita, de las de ¡mmm…!. Esto es solo un adelanto, porque vienen más (2a parte de las mejores tortillas de Barcelona).
Las famosas tortillas del bar PIMS se mudan y estrenan local en Poblenou. Local 225 abrió sus puertas el pasado verano y sus tortillas ya son famosas en todo el barrio. El chef Aimar es el responsable de ello, y también de preparar el resto de tapas que encontraréis en el bar. Un sitio genial, divertido y desenfadado para tomar un vermut con amigos y, naturalmente, un buen pincho de tortilla
El Bar Muy Buenas, la incondicional casa de comidas del barrio del Raval reabre de la mano de estos dos genios gastronómicos para retomar el rumbo de la cocina tradicional catalana en uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad condal.
Un esperado regreso al bar popular de toda la vida en donde lo importante es el comer. Aquí lo hacen todo a la catalana, hasta la tortilla de patata. Si aún no habéis probado la truita amb suc, por favor visitad este paraje gastronómico de la cocina local de proximidad. Eso si, ¡pide pan que aquí hay para mojar un rato!
Da gusto encontrar un local que cuida las tradiciones, un escondite en pleno apogeo moderno que sostiene una bandera local y apuesta por los productos de siempre. Como diría el gran sabio “la cuina d’un país és el seu paisatge posat a la cassola”.
Foto: Anel González
El grupo Sagardi ha querido homenajear las latas y conservas a través de su nuevo proyecto, la Bodega Vidrios y Cristales. Qué mejor lugar para hacerlo que uno de los edificios más representativos de Barcelona. Entre los “porxos d’en Xifré” encontramos este local que, tras entrar por la puerta, nos retrotrae a una bodega de barrio tradicional.
Cada vez que visitamos esta vermutería no podemos irnos sin antes probar la tortilla de patatas que nos llama desde la barra. Ya a lejos se puede apreciar que cumple con todas las normas de la cocina española, una tortilla perfecta, poco hecha, como debe ser.
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Foto: Uxía Estévez
Un negocio familiar que perdura desde 1989 en las manos de una nueva generación comandada por Jordi, apasionado de la cocina y encargado de coger las riendas de este pequeño templo gastronómico de Poblenou.
Un esquinazo que se ha apoderado del panorama gastronómico de una barriada exigente a golpe de cucharón. Y es que Mabel se ha asentado como el lugar favorito de muchos; nuestro rincón particular en el que ir a comer de lunes a viernes. Aquí se marcan un tortillón de campeonato, sin moderneces ni historias, ¡bocadillo de tortilla de patata!
Eso si, avisa antes a Jordi o no tendrás sitio. ¡El Mabel se cotiza muy alto!
Foto: Anel González
Cómo ya os hablamos hace tiempo en nuestro post de Fismuler, Nino Redruello y Patxi Zumárraga revolucionaron la capital madrileña en 2016 con un restaurante de mercado que sigue en muy buena forma y sorprendiendo a sus comensales día a día.
Como si de un disco de Gorillaz se tratase, su carta éxito tras éxito. El hit de este nuevo local de Barcelona, situado a los pies del nuevo Hotel Rec, es sin lugar a dudas su tortilla de ortiguillas. Un plato de esos que cuesta olvidar, places gastronómicos que nos acompañan hasta en nuestros sueños más húmedos. Un auténtico orgasmo culinario.
Así que aprovecha que apenas han abierto para hacerte hueco en el nuevo restaurante de moda de la ciudad condal. En breve no será fácil encontrar mesa.
Foto: Anel González
Esta bodega situada en la Barceloneta, al lado de la plaza del mercado, es un lugar imprescindible para tomar el clásico vermut.
Uno de los incondicionales del barrio, aquí te puedes encontrar todo tipo de tapas tradicionales y latas que para un ir picando una típica mañana de verano. Y es que aquí todo está buenísimo, desde sus bombas (que ese es otro tema) hasta su tortilla de patata a la manera tradicional.
Un pedazo de tortilla enorme adornado con unos pedazos de pan con tomate, un tenedor y a comer. Simple y deliciosa. Si te apetece estar tranquilo y con la calma, ve entre semana. Si, en cambio, eres de los que te encanta compartir mesa, el ambiente y el cachondeo, el sábado o domingo es tu día; un auténtico espectáculo. ¿Cómo no va a ser uno de nuestros lugares favoritos del fin de semana?
Texto: Alejandro Moneva