Restaurante Last Monkey

Cuando el chef Stefano Mazza abrió este verano el restaurante Last Monkey en el barrio de Sant Antoni, por la zona no se encontraban muchos lugares de cocina asiática. A través del nombre del restaurante, Stefano quiso hacer referencia a la superación de las expectativas de la gente, con la intención añadida de dar un toque personal a la comida.

Mazza, quien lleva viviendo en Barcelona diecisiete años, ha trabajado en una gran variedad de cocinas de fusión asiática, mezclando sabores vietnamitas y de cajún, o combinando la gastronomía asiática con la italiana, lugar de donde provienen sus raíces. Hace aproximadamente seis meses, decidió abrir su propio negocio para continuar experimentando con la fusión asiática, pero en este caso, “siempre desde el punto de vista no tradicional”, nos cuenta. “Platos regionales con un pequeño twist”.

Last Monkey es pequeño –hay espacio para 34 comensales– y dispone de una pequeña cocina, aunque no hace falta más, tiene lo necesario para resultar acogedor en un ambiente moderno. Una serpiente de luz amarilla se enrolla por el techo acabando en un nudo encima de la última mesa y las metálicas lámparas emiten un brillo rojo sobre las mesas altas. Los platos se preparan en el mismo local y están inspirados por un gran abanico de platos de base china, japonesa, tailandesa y coreana con influencias indias y vietnamitas.

Una mezcla de sabores desarrollada en una carta de pequeñas tapas, como la Ensalada Bo Cai de algas, espinacas, y fideos vermicelli de soja y la tapa de Berenjena China Confit en una salsa de chile dulce. La textura suave y firme de los fideos de alga es única y las berenjenas son un bombazo de sabor –con la salsa de chile se nos hace la boca agua nada más verla-.

El Massaman Curry de Albondiguitas está inspirado en los curris indios y taliandeses y, con un sabor que busca el equilibrio perfecto con el picante, lo sirven sobre arroz con una salsa cremosa de coco, tamarindo y cacahuetes tostados. No podéis marcharos sin probar su Wonton Frito con Pulled Pork, la ternura de la carne contrasta con el crujido del wonton. Para acompañar las tapas os recomendamos sus ligeras limonadas que marcan una línea divisoria entre los platos salados y el dulce del postre.

El Choco Bao, un bao bun relleno de una crema de chocolate y avellana, es un postre estrella, un plato típico de china elaborado con pan cocido al vapor que se puede rellenar tanto con ingredientes dulces como salados.

En Last Monkey mezclan los sabores asiáticos con la gastronomía del mundo de una forma sencilla que te hará desear probar todo lo que aparece en su carta, y con los precios del restaurante, quizás eso sea posible.