Ante la clara oportunidad de abrir un lugar con un estilo diferente y platos de calidad en la zona alta de Barcelona, cuatro buenos amigos decidieron abrir el restaurante Lío de 4.
El nombre nos llama la atención, y al preguntarle a uno de sus socios se ríe y nos comenta que son 4 amigos (Xavier, Karina, Alex y Carlos) que provienen de rubros totalmente ajenos a la gastronomía pero que al compartir el gusto por el buen comer decidieron «liarse» con este proyecto. Hace poco más de 1 año y medio abrieron el restaurante, y durante este tiempo se han enfrentado al constante desafío de la búsqueda del estilo e identidad propia, siempre teniendo presente la calidad del producto.
El público que frecuenta el lugar está acostumbrado a una cocina más bien clásica, por lo que el desafío principal para Guillermo Ramos, actual Chef, es ir introduciendo poco a poco propuestas diferentes y más atrevidas, que no se ven con mucha frecuencia en este sector. No es un camino fácil, y hay que hacerlo de manera inteligente, pero poco a poco la gente va probando sabores nuevos que gustan y vuelven para repetir.
Al entrar a Lío de 4 es imposible no notar la extensa barra, con visión total de su cocina, que recorre el largo de prácticamente todo el lugar. Una forma de crear un espacio para la conversación e interacción, y de acercar la cocina a los comensales que frecuentan el local.
En su carta actual es posible encontrar algunos clásicos mediterráneos como lo son las croquetas de jamón ibérico, buñuelos de bacalao y alioli de ajo negro, y la burrata con pimiento escalibado, tomate seco y pistacho. Una cocina claramente enfocada en el producto de mercado de primera calidad cuidadosamente seleccionado.
Otros platos tradicionales (y no por eso menos deliciosos) son el pulpo cocinado a baja temperatura con parmentier de sobrasada y brotes verdes, los arroces y pescados frescos cocinados al momento.
Pero sin duda lo que más llama nuestra atención son los nuevos platos mediterráneos con una clara influencia de cocina internacional y fusión que se están introduciendo gradualmente en la carta y en las sugerencias del día, como por ejemplo el Bao de calamares con salsa de kimchi o el Bao de rabo de buey con cebolla encurtida estilo mexicano. Ambos bocadillos con mucho sabor, textura y una fusión de sabores muy interesante.
Terminamos con el Tataki de atún con shiitake confitado con sésamo y lima, uno de nuestros favoritos. Con este plato comprobamos que la calidad del producto es uno de sus sellos de identidad. Guillermo nos cuenta que están trabajando en un cambio de carta. La nueva carta llevará más platos como los descritos anteriormente para añadir novedad y dinamismo, así como atraer un público más jóven que busca sabores diferentes.
En Lío de 4, nosotros aconsejamos dejarse recomendar. El espacio y la amabilidad con la que atienden invitan a relajarse, pedir una copa de vino y disfrutar de sus más exquisitas y cuidadas preparaciones.
Carrer de Mandri, 22, Barcelona
Horario: Lunes a Sábado de 12 a 16h y de 20 a 23:45h
Fórmula de mediodía: 16,5 €
Precio promedio: 25-35 €
Texto y fotos: Kathrin Behrens