Viajar por los países de América Latina con cada bocado. Ese es el objetivo de MamaQuilla, un restaurante que rinde tributo a la comida latina, a su sociedad y a su estilo de vida. MamaQuilla es un local que desprende ritmo, sabor y espíritu latinoamericano.
Su nombre proviene de la diosa inca de la luna y protectora de la mujer, una conexión que se establece para poner en valor la cocina tradicional del delicioso recetario latinoamericano. En MamaQuilla se rinde tributo a la gastronomía de las raíces, a aquella que se cocina a fuego lento y que esconde una historia detrás de cada ingrediente.
Desde México hasta Colombia pasando por Brasil, Argentina o Perú. La carta de MamaQuilla recorre todos los países latinoamericanos a través de su cocina. Su oferta gastronómica ha sido creada para compartir. En su carta encontrarás platos como el patacón XXL de ventresca de Joselito tratado como un pibil, crème fraîche de tomate y encurtidos; el pescado costeño frito entero con mayonesa de ají amarillo; el ceviche verde de pargo, dados de aguacate, tirabeques y achiote; o la causa limeña con carabinero, salsa botija y chips de patata violeta.
Para acompañar a todos estos platos, en MamaQuilla cuentan con una bodega compuesta por vinos de di diferentes partes del mundo que acompañan a la perfección a los diferentes platos. Cuentan con más de 100 referencias tradicionales e internacionales de los más tradicionales a otros más desconocidos.
Después de la comida, llega el momento de los cócteles. El bartender Juan Olmos ha creado una carta con cócteles atrevidos a base de rones, tequilas y mezcales. Tragos canallas pero frescos.
Pero MamaQuilla no es solo comida y bebida. Este restaurante ha recreado la esencia de las calles de Latinoamérica a través de la decoración. Este restaurante está decorado como una casa tradicional que invita a relajarse, dejar de lado las obligaciones y disfrutar. La zona del patio da la bienvenida con paredes de colores y balcones adornados con flores, una zona más informal perfecto para el aperitivo en barra. La Estancia es el lugar perfecto para sentarse a la mesa y disfrutar de una comida. Y por último el primer piso es el lugar más especial de MamaQuilla, un espacio multifuncional que sirve como sala privada para eventos.
MamaQuilla es un restaurante perfecto para desconectar, para disfrutar de una cena con sabor y olor latinoamericanos. Un local en el que además de disfrutar de la gastronomía de Latinoamérica podrás comenzar a disfrutar de la noche madrileña a través de sus cócteles, música y espectáculos.
Dirección: Calle José Abascal, 61 Madrid
Horario: De lunes a sábado de 13:30 a 16:00 horas y de 02:30 a 03:00 horas. Domingo cerrado.
Precio medio: 50€
Texto: Elena R. Feijóo
Fotos: Cedidas por el restaurante