A veces, una conversación casual te puede cambiar la vida. Una de esas tuvieron el brasileño Marcio Fernandes y el mallorquín Ignasi Forteza hace cinco años cuando esperaban a sus respectivos hijos a la salida de la escuela. A Marcio no le solía gustar quedarse a esperar, y lo hacía poco. El hijo de Ignasi estaba en ese colegio solo unos días, a la espera de una plaza en otro colegio. Al verlos salir a los niños juntos, ambos hombres se saludaron y se pararon a charlar. Ignasi era un arquitecto con un estudio en el que dirigía a quince personas, pero su sueño era montar un restaurante de sushi. Marcio le respondió: ¡yo soy sushi man! Y tenía exactamente el mismo sueño.
Al tiempo, a la vez que Ignasi seguía con su estudio, se dedicaron a buscar el local. Mientras el uno trabajaba en el diseño, Marcio en las recetas. Un año después nacía el Nakashita, en una tranquila calle del Born en Barcelona. Un restaurante que tipifica el concepto de fusión gastronómica. Unas bases claramente japonesas, pero con conceptos filtrados a través de la imaginación de Marcio (entre sus invenciones destaca uno de sus platos más pedidos, el exquisito sweet nigiri, donde sobre el arroz se le coloca una rodaja de queso, dulce de guayaba y foie gras caramelizado). Su filosofía es “respetar la esencia de los alimentos”. Y si no conoces las bases de la cocina, dice, “no puedes fusionar”. Asegura no utilizar más de dos o tres ingredientes en cada preparación y que en el momento de elaborar un nuevo plato saca todo lo superfluo hasta quedarse solo con la esencia de lo que quiere expresar, ya sea a través del sushi, del nigiri…“Soy muy abierto y no tengo ningún miedo a la hora de crear un plato”, explica. De formación autodidacta, el primer contacto con la cocina fue cuando salió de Brasil para Europa y sencillamente tenía que “cocinar para comer”.
En la actualidad, el restaurante cuenta con cinco cocineros, tres de ellos trabajan en la barra donde también comen algunos de los clientes. “Me gusta asesorar a los que no saben qué comer…normalmente en la barra se sientan los más curiosos y muchos me preguntan sobre los platos mientras los estoy elaborando”, explica.
El Nakashita también ofrece un servicio de reparto a domicilio de los platos que preparan cada noche en el mismo restaurante. Es parte de un negocio que está perfectamente repartido entre la parte gastronómica que lleva Marcio y la parte de diseño y gestión, que lleva su socio Ignasi. Fue idea suya la de pintar el local de negro por dentro (“le dije ‘quién entiende eres tú’ y le dejé hacer. Ahora me gusta mucho como queda”, cuenta Marcio) y también el encontrar un logo que los representara, obra de Joan Tarragó y Marga López. El logo es un sello: un pescado troceado, con fideos a los lados, algas por encima y unos udon. Tan fusión como el Nakashita.
Nakashita
Carrer del Rec Comtal, 15, 08003 Barcelona
932955378
Horario: De lunes a domingo de 13:30h a 16:30h y de 20:30h a 24:00h.
Texto y Fotos: Tanit Parada Tur