Óscar Mulero comienza su andadura como DJ en las cabinas de los clubes de Madrid, su ciudad natal, allá por los años ochenta. Tras una larga y exitosa carrera, su profesión le ha llevado a viajar por todo el mundo, ponerse al mando de dos sellos discográficos: Warm Up y Pole y, últimamente, a producir álbumes de otras bandas más alejadas de su estilo. Desde hace unos años reside en Asturias, tierra en la que ha encontrado la calma y algún que otro lugar para disfrutar de la gastronomía.
Un restaurante
Difícil decidirse por uno… Por mi trabajo tengo la suerte de viajar bastante y poder disfrutar de una buena variedad de comida en infinidad de ellos, pero en este caso me quedo con uno de la región asturiana, que es en la que vivo, en concreto en Bañugues. El sitio se llama «Los Campos» y la especialidad son arroces, pescados y mariscos. El género es muy bueno y es exclusivamente pescado en la zona de Cabo Peñas, que está al lado, ¡así que el paseo por el faro de Peñas después de comer completa el plan perfecto! Es un sitio que pasa desapercibido y curiosamente no es de los más populares pero de lejos es uno de mis preferidos.
Un plato
Esto va a ser también difícil. Además de que durante un tiempo es uno y luego varía… Ahora creo que serían los garbanzos con bacalao y espinacas, son mi debilidad
Un producto
La verdura y el pescado, no podría pasar sin ellos.
Un trago
Adoro el vino y el último en descubrir y con el que quedé maravillado fue «Trapiche», un Merlot de la Región de Mendoza (Argentina).
Si me invitaras a tu casa a cenar ¿qué me cocinarías?
No soy un experto en la cocina, a pesar de que me gusta y me distrae bastante, con lo que mi menú no es muy amplio, pero creo que haría una lubina salvaje al papillote con algo de zanahoria, ajo tierno, puerro y cebolleta roja por dentro. La patata al horno sería la guarnición. Botella de blanco Belondrade y Lurton para la bebida, y para el postre llevaría unas milhojas de La Fe, que acompañadas de helado de turrón… ¡no fallan nunca!
Fotos: Laura Meixús