Inspirándose en principios de 1900, tanto en su menú como en su estética Art déco, Andrés Amor decidió hacer un viaje en el tiempo y llevarse al chef Diego Isunza con él.
Su objetivo fue rescatar procesos de cocción originales para ofrecer recetas de estofados y braseados con una fuerte influencia europea. El potencial era tan grande que pronto abandonaron la idea inicial de hacer comida para llevar. Desde octubre de 2016, en el tranquilo barrio de la colonia San Miguel Chapultepec, Padella abrió sus puertas para compartir comida casera de antaño y contemporánea a la vez.
El lugar es discreto, acogedor y logra a través de la iluminación y la delimitación de espacios diferentes un ambiente íntimo e incluso dramático ad hoc para múltiples situaciones. Grupos, parejas, hombres de negocios, amigos, misántropos y famosos pasarán todos desapercibidos.
La carta ofrece un elenco de platos fuertes a cual más suculento además de las sugerencias del chef que van cambiando según la temporada. Desde un clásico francés como el boeuf bourguignon hasta una opción más actual de unos gnocchi caseros, acompañados con un ragú de estofado de rabo de res cocinado durante seis horas al vino tinto y especias. Lo sirven con parmesano recién rallado, ingrediente infalible en un auténtico plato de pasta. Definitivamente, es un viaje en el tiempo, en el espacio y de la boca al corazón. El sabor tiene carácter y marida muy bien con cualquiera de los tintos que tienen por copeo.
Diego es un tipo entusiasta, risueño, enérgico, que creció entre ollas y aromas de los platos que su abuela cocinaba para la familia y para la empresa de catering que tenían. Lleva la pasión por la comida en el ADN y sin embargo quiso ser músico. No fue hasta más tarde que decidió cambiar de batería, como él dice, y dedicarse plenamente a la cocina. Eso sí, la música sigue siendo un ingrediente imprescindible en la sala de producción. Le ayuda a dar pie a la creatividad y a liberarse de la estructura. Así nació muy probablemente esta sugerencia del chef inspirada en una ancestral salsa de cebolla de 1700, al ritmo de funk. Se trata de huachinango con salsa soubise, setas glaseadas y perejil crujiente. Una muy buena combinación de texturas, sabores y temperaturas.
Padella significa sartén en italiano y es un homenaje al tiempo, a la paciencia y al respeto por todos y cada uno de los pasos y procesos que hay detrás de cada plato. No es casualidad que las recetas de las abuelas sean siempre tan deliciosas y nutritivas. Imperdible.
General Antonio León, 70. Colonia San Miguel Chapultepec México D.F.
Horario: lunes a sábados de 9h a 23h, domingos de 9h a 21h.
Texto y Fotos: Livia Arroyo Cella