Situado en pleno barrio de Salamanca, Pólvora es un restaurante sorprendente que arriesga con cada creación y sorprende con cada plato que llega a la mesa. Su cocina está basada en fusionar productos de origen nacional con diferentes técnicas y sabores del mundo.
El restaurante se divide en tres espacios: la barra, perfecta para tomar un aperitivo; el salón, ideal para una comida de negocios; y el reservado, una zona pensada para una pequeña celebración. Su decoración ha sido meditada hasta el más mínimo detalle: paredes desgastadas, lámparas de diseño, cortinas aterciopeladas y sofás y butacas de colores.
La barra es el lugar perfecto donde tomar el aperitivo, siendo la michelada uno de sus tragos estrella. Sin duda, una opción perfecta para abrir el apetito y disfrutar de cada sorbo mientras te relajas con la música ambiente que suena en el restaurante.
La carta es creación del chef Gonzalo Sainz. Un chef que basa sus creaciones en el sabor y en el producto. Platos como la ostra gallega con un aguachile de pepino y jalapeño en espuma o los noodles con txangurro thai son platos frescos y llenos de contraste. Entre los platos principales destacan opciones como la dorada con puerro asado o los chipirones con hummus de alcachofa, dos platos que harán las delicias de los amantes del producto del mar.
El momento de los postres en Pólvora también es espectacular. Entre las opciones dulces se encuentran dos tartas realizadas al momento y entre las que es difícil escoger: la tarta de queso (donde Gonzalo ha sabido encontrar el punto perfecto entre el toque dulce del azúcar y el salado del queso) y la tarta de chocolate, un pastel cremoso y absolutamente delicioso.
Pólvora es un restaurante que reinventa clásicos, que sorprende y que no deja indiferente. Un restaurante al que acudir para sorprenderse con el espacio, los platos y el ambiente.
Dirección: Calle de Juan Bravo, 23, 28006 Madrid
Horario: de lunes a domingo de 12:00 a 01:00 horas.
Precio medio: A partir de 40€
Texto: Elena R. Feijoo
Fotos: Nacho Alcalde Ruiz