En 1982, Mercé Navarro fundó Roig Robí, un espacio gastronómico referente de Barcelona que, actualmente, conforma un clásico de la ciudad. Un espacio construido sobre unos sólidos cimientos: la pasión gastronómica.
En más de una ocasión, el haber permanecido en un mismo lugar durante un prolongado tiempo se considera como un hecho rutinario y monótono, incluso aburrido… Un hecho que dista totalmente de la realidad. Son ya 37 los años que han pasado por Roig Robí y, precisamente, es el tiempo quien le otorga valor, amigos e inumerables historias. Y es que el tiempo no significaría nada, perdería su esencia, si mirásemos atrás y todo siguiera igual. A lo largo de los años, junto a su equipo, comensales y paralelamente a la sociedad, Roig Robí ha crecido, en todos los sentidos.
Amistades como la del pintor Antoni Tapies ha surgido entre las paredes del restaurante, paredes que actualmente cuelgan sus obras. Siendo, además, uno de sus cuadros pintado en 1992 el diseño de su actual menú. Un restaurante frecuentado, asimismo, por cineastas, políticos y escritores: Dan Brown, García Marquez, Woody Allen…
El restaurante inició su andadura como uno de los legados de la Nouvelle Cuisine. Con los años la cocina ha ido evolucionando paralelamente a los tiempos y movimientos gastronómicos del momento, aunque siempre heredando la tradición gastronómica de Cataluña y concretamente, la interpretación de Mercé de esta. Una herencia gastronómica que actualmente ha pasado a manos de su hijo, Joan Crossas Navarro. Una cocina sencilla pero elaborada, que se basa en el tiempo y lugar, donde el producto es el protagonista.
El continuo cambio también ha sido evidente en el espacio. Las diversas y dinámicas salas que lo componen, aunque diferentes entre ellas, mantienen su esencia clásica. Cabe destacar su patio interior -decorado como un jardín-, cuyo ambiente dista completamente de la ciudad: en pleno corazón de Barcelona puedes sentarte en una mesa rodeado de naturaleza, acompañando el momento con la natural banda sonora de los pájaros. Un patio que alberga el recuerdo de un sauce llorón, y que los años ha permitido que su flora crezca y se decore naturalmente.
Su carta -perfeccionada con los años- ofrece verdaderas maravillas, tal y como sus espárragos blancos, la tostada de calçot con romesco, los guisantes con butifarra negra, el estofado de sepia, lubina con coca de cebolla, su tartar de lubina, gambas y huevas de trucha, su exquisito rabo de toro… Sus postres no se quedan atrás, destacando la fresca la crema de yogurt con sorbete de mandarina o el helado de avellana con merengue gratinado. Todo elaborado con el pescado más fresco del día, verduras de temporada y cercanía, y con carnes con D.O.
Roig Robí Delivery
Desde el pasado 24 de octubre, la oferta gastronómica de Roig Robí también disponible en formato delivery. Puedes hacer tu pedido a través de su página web
Dirección: Carrer de Sèneca, 20, 08006 Barcelona
Precio medio: 50 euros
Fotografía: Ruth López
Texto: Estefanía Garcés