El café Roscioli es el hermano sofisticado del Forno Roscioli, una de las panaderías con más renombre de la capital italiana, y con razón. Llevan sirviendo pan y pizzas exquisitas desde 1972. La cafetería, situada muy cerca del Campo de’ Fiori, a unos metros de la panadería y del deli Roscioli, ofrece pasteles y bollería además de un menú que incluye especialidades de la casa.
Al entrar en el local, alargado, estrecho y decorado de forma elegante y minimalista, se puede ver a los habituales tomando el café en la barra de mármol, al más puro estilo romano. Si se avanza hasta el final se accede a un salón pequeño y cuadrado, con paredes oscuras cubiertas de cuadros y fotografías. Allí hay una mesa grande, rectangular y alta al estilo barra, convirtiendo la sala en un lugar para relajarse y leer el periódico tomándose un desayuno o brunch más elaborado.
Además de la deliciosa bollería clásica, como cornettos y pains au chocolat, también tienen tartas de tradición italiana como la ciambellone de chocolate y naranja, una tarta estilo bizcocho, o pasteles de esos tan bonitos que da pena comérselos, como el pastel de mousse de chocolate o los pasteles estilo bignè.
En el menú del café hay platos como el yogurt con frutas de temporada, además de sándwiches caseros y tablas de queso y charcutería e incluso ostras a la hora del aperitivo. También sirven zumos naturales y champán, cócteles y vinos. Además, el producto con el que elaboran sus platos tiene la garantía de calidad de la Salumeria Roscioli, otro comercio del imperio Roscioli que además de ser casa de comidas, es una delicatesen en la que se puede encontrar desde Pecorino de Pienza hasta jamones de pata negra.
El pan que sirven sigue la receta de Pier Luigi Roscioli, uno de los panaderos más alabados de Italia. Su amplia experiencia al frente de la panadería familiar significa que lleva años perfeccionando su receta de pan de masa madre. En cuanto al café, lo traen de Torrefazione Giamaica Caffè en Verona y está a la altura del resto de los productos. Si no hay tiempo -o espacio, que es muy limitado- para sentarse y pasar un rato, merece la pena entrar para un espresso rápido en la barra y dejarse contagiar por el ritmo y el gusto cafetero de esta ciudad.
Piazza Benedetto Cairoli, 16, 00186 Roma
Horario: lunes a sábado: 07:00h a 11:00h; domingo de 08:00h a 18:00h
Texto y fotos: Mónica R Goya