Son muchas las películas americanas que una persona ve a lo largo de su vida, y son muchos los viajeros que vuelan hasta el país de las oportunidades para descubrir con sus propios ojos cómo es la cultura americana. Y no hay forma más divertida que conocer una cultura que con la gastronomía. ¿Cómo es la comida americana?
Estados Unidos, además de ser muy grande, también tiene una gran variedad gastronómica, ya que personas de todo el mundo, conviven en el mismo lugar. Con ello, cada una ofrece sus raíces y aporta una gastronomía multicultural a Estados Unidos. Por ejemplo, si estás en Nueva York y puedes acercarte a Chinatown, no dudes en probar uno de los mejores ramen del mundo en Rajin Ramen, donde además de tener shushi de calidad o entrantes deliciosos japoneses, puedes probar auténtico ramen de pollo teriyaki o de cerdo picante para los más valientes.
Aunque no hace falta buscar pequeños locales, si quieres disfrutar de grandes platos con comida rápida de calidad, hay diferentes establecimientos Wendy’s por todo Estados Unidos. Es un sitio especializado en hamburguesas, pero lejos de ser comida rápida común, la carne y los ingredientes tienen una calidad superior. Sin duda, uno de los descubrimientos más interesantes para los que viajan por primera vez a América.
Cada estado tiene su particularidad, y es que no todo son las grandes hamburguesas que se ven en las películas. En Boston, por ejemplo, lo más famoso es comer langosta. Pero no se trata de restaurantes para bolsillos elevados, si no que han popularizado la langosta y está al alcance de todos. En Luke’s Lobster Back Bay, existe gran variedad de langosta en diferentes formas: rebozada, frita, asada… Y en cómodos envases -como en los sitios de comida rápida- para comer dónde quieras.
No sólo hay buenos restaurantes en las grandes ciudades. Existen cantidad de restaurantes de carretera con comida auténtica americana que llaman la atención por sus precios bajos. En Texas Roadhouse, se encuentra una de las mejores carnes. Los complementos son típicos de la cultura americana, como Mac&Cheese, puré de patata o maíz desgranado.
Pero sin duda alguna, si se está en Estados Unidos, hay una cosa que todo el mundo debe probar antes de volver a sus casas: los desayunos americanos. Existen dos variedades, la dulce y la salada, pero las dos son un manjar para el paladar. Si se prefiere salado, se encontrarán las conocidas tortitas cubiertas por diferentes tipos de miel. Se pueden aderezar con nueces, con almendras o plátano, incluso cubierto de nata. Para los más golosos, recomendamos cambiar la miel por nutella.
En el caso de preferir salado, el desayuno por excelencia son las toritas con bacon, huevos fritos, lomo adobado y salchichas. Es la estrella del desayuno americano y no deja indiferente a nadie. Algunos, se atreven con un batido de chocolate o vainilla al terminar, pero no es apto para todos los estómagos. Este tipo de desayuno popular (y que está abierto todo el día) se puede encontrar en iHop, una de las franquicias más importantes y conocidas de los Estados Unidos.
Texto: Alicia Alegre
Fotografía: Alicia Alegre y Laura Torres