Sirimiri es un local situado en pleno corazón de la Parte Vieja donostiarra, justo a lado de la Iglesia de Santa María y conectado a su hermano mayor Atari.
Aquí podréis disfrutar de una variedad de maravillosos pintxos y raciones, como de cócteles con y sin alcohol, siempre acompañado de un repertorio musical de lo más alternativo.
El local, decorado con gran gusto y originalidad, está dividido en 3 zonas; la barra, la zona de barra donde sentarse y observar cómo sus cocineros terminan de emplatar la comida frente al cliente, y la zona de mesas. Diferentes zonas ideales para los txikiteros (que pueden disfrutar de su vino por 1€ la copa sin perder sus costumbres), a los que les gusta enredar por la barra, y para aquellos que quieran sentarse a compartir raciones o simplemente hablar de la vida acogidos por un ambiente muy cálido.
Su cocina es una cocina internacional que se plasma de una manera muy refrescante y que no es habitual encontrar. Se basa en un producto local y de temporada de la mejor calidad posible, por lo que siempre tratan de mantener una relación muy cercana con los productores de la zona. Sirimiri es de esos lugares con los que nada más escuchar su nombre empiezas a salivar.
Para comenzar con nuestro viaje gastronómico nos dejamos seducir por tres pintxos de barra a los que echamos el ojo. Con unos sabores tan distinguidos de los pintxos convencionales, el pincho de changurro con gratinado de alioli, el pintxo de pato desmigado con naranja y una salsa de aguacate, y el pintxo de bacalao ahumado con pimientos del piquillo y queso suave nos abren el apetito y nos dejan con ganas de más.
Pero esto sólo acaba de empezar. Nos traen un tarro que oculta el interior. Hay humo, ¿qué será?. Destapamos y una nube con olor ahumado se escapa por el comedor, dejando paso a un salmón ahumado con queso suave y pepino con más sabor que nunca.
Después el steak tartar, acompañado de una tostada con mantequilla casera brutal y un poco de salsa alioli. Y un kebab de cordero con cuscús de verduras y humus de garbanzos más que envidiable. El cordero, como no podía ser de otro modo, viene pinchado en un palillo que nos recuerda claramente a la pieza de carne que se encuentra en los establecimiento destinados a la venta de estos productos.
De pronto encontramos en nuestra mesa una gigantesca ración de pulpo con un pintón indescriptible. Va acompañado de un aceite de perejil, mojo verde, frambuesa y salicornia. Una combinación de sabores y colores que realzan todo el sabor del producto y nos dan paso al delicioso postre. Una refrescante espuma de yogur con lichi y granizado de maracuyá que claramente es devorada por todos.
Sin duda alguna, Sirimiri es uno de esos sitios en los que siempre se acierta, en los que la música, la comida y el ambiente en general es insuperable.
Calle Mayor, 18, 20003 San Sebastián, Guipúzcoa
Teléfono: 943 44 03 14
Horario: Lunes, Martes y Jueves de 18.30h a 01.00h. Viernes de18.30 a 02.30h Sábados de 12:30h a 17:00h y de 18:30h a 02:30h. Domingos de 12:30h a 17:00 y de 18:30h a 01:00h.
Texto: Elena Olaran
Fotos: Carlos Vicente