Pon un grill en tu cocina. Hace 3 años y medio los propietarios de St. Anselm abrieron sus puertas en Williamsburg para ofrecer comida al grill con una oferta cercana y asequible de carnes y pescados. El resultado es un éxito rotundo; sin aceptar reservas y con colas consecutivas día tras día con asiduos al sabor de sus productos.
Un sabor especial porque prácticamente todo aquí toca el grill en algún punto: ternera, cordero, pulpo, almejas, hasta el aguacate. La chef de Portland Katrina Zito tarda tan sólo un instante en dar la resolución sobre cuál son los tres platos estrella del lugar. Un puré de patatas salteado con aceite de trufa, las espinacas gratinadas, y por supuesto, el filete de arrachera. Como cabe esperar en un restaurante de cocina al grill, la carne es la protagonista indiscutible.
Para abordar la cocina de carne de primera calidad usan simpleza en el proceso y técnica en la ejecución. Sazonan con pimienta y sal, grillean hasta obtener la temperatura interna exacta (120 a 125 grados medidos con termómetro), y dejan reposar 10 minutos para obtener la mayor riqueza de sus jugos. Y para que el jugo sea al gusto de cada uno de los clientes tienen seis puntos de cocción (blue, rare, medium-rare, medium, medium-well & well). Si sois un grupo grande el asado de costilla es ideal para compartir.
La oferta no termina aquí y las opciones son múltiples. También hay un pollo macerado con limón y estragón, que es uno de los platos favoritos de la chef. O el pescado, que brilla por sí solo y tiene poco que envidiar al resto de la carta; salmón, trucha, caballa…
El local de St. Anselm está comunicado por el patio a su cervecería hermana, Spuyten Devil, y está situado en frente de otro restaurante de sus mismos propietarios, que se llama Fete-a-sau, y también funciona a las mil maravillas. Allí la carne es a la barbacoa y se diferencia de St. Anselm por ofrecer carne ahumada y macerada, en un ambiente más distendido. Cuando pases por la esquina de metropolitan con havemeyer, invadida por estos emprendedores, con toda seguridad te llegará el aroma a sus jugos, y tu imaginación volará.
Y un apéndice: procura cenar temprano para evitar colas y pídete una cerveza en Spuyten Devil, hasta que llegue tu turno, la primavera se asoma tras este apocalíptico invierno y el patio es delicioso.
ST. ANSELM
Precio: $15- $39
Horario:
Lunes a jueves: 17.00 – 22:45
Viernes a domingo: 12.00 – 22:45
Fotos y Texto: María Rosa Badía