Hoy es martes 13.
Si al leer esta fecha se te han puesto los pelos de punta y has tocado madera, estás en el lugar indicado. Supersticiosos y supersticiosas, este artículo va por vosotrxs. Así que, sigue leyendo o toda la mala suerte de este martes 13 caerá sobre ti.
¿Qué tal si brindamos con agua antes de empezar? Es broma. Sabemos que solamente lo harías a cambio de que mil gatos negros se cruzarán en tu camino.
Y nosotrxs no somos gatos, pero tenemos tanto instinto que podríamos ser felinos. Así que, para seguir alimentando tus ganas de creer, hoy te contamos el origen de las supersticiones culinarias más estrambóticas y las actualizamos al siglo 21.
Descubre por qué no debes…
- Derramar la sal en la mesa: los romanos decían que este gesto invocaba al diablo, ya que este ingrediente era un bien escaso muy valioso. Por eso, derramarla accidentalmente se considera un acto muy desafortunado. Hoy en día la sal está al alcance de todos, así que sería equivalente a derramar la gasolina por fuera del tubo de escape. Ya sabes, los números rojos en tu cuenta serán lo más parecido al diablo hasta final de mes.
- Brindar con agua: los antiguos griegos brindaban con agua cuando un ser querido se moría. Así que este gesto se considera desear la muerte a la otra persona. Aunque actualmente, seguro que conoces algún alcohol de marca blanca con el que brindar sea un delito. Con él la muerte llega de forma súbita: la resaca al día siguiente.
- Colocar mal los palillos: si viajas a Asia, mejor no coloques los palillos encima de un cuenco de arroz. Es símbolo de muerte prematura, ya que esta forma se asemeja al modo en que se coloca el incienso para honrar a los muertos en ese continente. Un tip que no te dicen en las agencias de viajes, pero que en Plateselector consideramos que debes saber.
- Cortar los fideos: si cortas los fideos chinos con tenedor, en la cultura asiática simboliza que estás acortando tu vida, porque este plato representa la longevidad. ¡Ah! Y lo mismo pasa con los espaguetis, ni se te ocurra cortarlos o algún italiano te conjugará una maldición. ¡Mamma mia!
- Colocar el pan al revés o dejarlo caer al suelo: se considera una ofensa al cuerpo de Cristo colocar el pan boca abajo. Y si se te cae al suelo, la costumbre es besarlo y hacerle tres cruces para alejar las desgracias. Así que ya puedes ir haciendo morritos y practicando el beso de película que le vas a dar al pan. Ni Jack y Rose en el naufragio del Titanic.
Con estas cinco lecciones de supersticiones culinarias, ahora ya estás preparadx para ir a comer. Aunque por si acaso, ponte un trébol de cuatro hojas en el bolsillo. Nunca se sabe lo que puede pasar 😉
Salud y….. ¡BUENA Suerte!
Texto: Clara Puig