Por mucho que les duela a los franceses reconocerlo, es más fácil encontrarte un croissant demencialmente perfecto en Tokio que en París. Poco extraño teniendo en cuenta la dedicación que muestran los japoneses cuando se obsesionan con perfeccionar artesanías Europeas como tocar la guitarra Española o confeccionar prendas de ropa al estilo de los Italianos. Bajo estas premisas, fue casi predecible que el premio al Mejor Croissant Artesano de Mantequilla de España 2013 se lo otorgaran al obrador de un pastelero Japonés afincado en Barcelona llamado Takashi Ochiai.
Takashi partió de su ciudad de Niigata hace 40 años para formarse como pastelero, trabajando en lugares como Londres, Bruselas o París antes de quedarse en Barcelona a compartir el resto de su vida junto a su esposa Mari Carme.
Hace 33 años no existía en la Ciudad Condal una pastelería dedicada a dulces tradicionales japoneses como los dorayakis, tan adorados por Doraemon, o los mochis de pasta de arroz rellenos de confituras. Y aunque los bizcochos Castellanos son parte de nuestra herencia, pocos Barceloneses conocían la versión nipona del Kasutera con sabor a té matcha. Esto sirvió para que Ochiai apostara desde el principio por un equilibrio entre la pastelería tradicional de su tierra y la Franco-Catalana.
En esta nueva serie llamada #makers, nos centramos en artesanos que han encontrado fórmulas de trabajo a las que han sido fieles durante años y con los que han encontrado el éxito para ofrecer productos de calidad y honestidad.
Aquí un pequeño retrato audiovisual de Takashi Ochiai por Beatriz Janer para Plateselector.
[youtube id=»3fnbbXK7jlk» width=»620″ height=»360″]
Texto: JW
Realización y fotos: Beatriz Janer