Taverna Hofmann surge con la intención de crear un restaurante de proximidad para alejarse así del concepto más formal del otro restaurante de la casa, el emblemático y selecto Restaurante Hofmann con estrella Michelín.
Apoyado por el rico legado de Mey Hofmann, Taverna explota al máximo el concepto que su propio nombre indica: una cocina con los platos típicos de taberna pero con una elaboración muy cuidada que trabaja con productos de alta calidad y una detallada presentación, siempre con el sello Hofmann, como no podía ser de otra manera.
Sus paredes cuentan historias del buen comer y el buen beber, algo que siempre alegra la vida, más todavía ofreciendo una propuesta informal, actual y con recetas de platos interpretados por nuestros chefs, toda una experiencia para los cinco sentidos en la que ningún detalle nos deja indiferentes.
Todo su buen hacer se plasma en una carta que va variando con la estación del año, todo para poder trabajar con los mejores productos y exprimir así los mejores sabores de cada temporada. Razón por la cual apuestan también por una variada selección de platos del día que sorprenden por su estilo y originalidad.
En Taverna encontramos la cocina clásica que convierte la receta más sencilla en el manjar más exquisito y acompañada de una extensa carta de buenas carnes, excelentes pescados y sabrosos arroces.
Algunas de sus deliciosas propuestas de entrante son el ajoblanco de macadamia con caballa marinada en sake y helado de coco o sus jugosas croquetas de fricandó con alioli de ajo negro.
No podía faltar un arroz y su estilo meloso/caldoso de salmonete es un acierto total por su prodigiosa y precisa receta y la sabiduría que exige su cocinado.
Su bacalao a la llauna con tierra de quicos y el pichón en 2 cocciones con parmentier ahumada y setas silvestres transmiten una suave harmonía de sabores consiguiendo la cocción perfecta en cada alimento.
Los postres, toda una marca de la casa que han hecho de su escuela un referente internacional, y algunos de sus sabores más dulces se encuentran por ejemplo en el huevo de chocolate o la esponja de avellana y toffe.
La particularidad de este restaurante es que son los propios alumnos de la escuela los que se encargan del funcionamiento de la cocina, acompañados siempre por los chefs y profesores de la escuela, aprendiendo directamente de estos de una manera intensiva y constante para llegar a ser los grandes chefs del futuro, un futuro que, hoy por hoy, tiene sus raíces en Casa Hoffman.
Carrer de Girona, 145, 08037 Barcelona
Texto: Maria Acero
Fotógrafa: Andrea Invierno