Timor Leste es una de las democracias más jóvenes del mundo que, tras 400 años como colonia portuguesa y más de 25 de invasión indonesia, logró su independencia en 2002 para convertirse en un paraíso perdido. Un lugar mágico al que solo podemos llegar desde Singapur, Bali y Darwin. Sus gentes, amables y con dulces sonrisas, te atrapan, haciéndote descubrir el encanto, tanto de su cultura, como de su gastronomía basada en la agricultura -principal fuente de abastecimiento de la isla-. Por ello, es el destino perfecto para vegetarianos y veganos, puesto que su cocina es rica en verduras, frutas y especias. Aunque también destaca el pescado ya que la pesca es una actividad frecuente entre la población local. Timor nos presenta una cocina sencilla, rústica y fresca, que respeta el sabor auténtico de los alimentos.
En Timor Leste no se han olvidado de su pasado portugués porque siguen manteniendo una estrecha amistad, un vínculo que se ve reflejado en los fogones donde combinan el pescado, el ajo y la patata acompañados con un toque exótico a base de frutas. Además en toda mesa timorense no fallan las ensaladas frescas al estilo mediterráneo y el clásico bacalao portugués, que llega a la remota isla del sudeste asiático gracias a los supermercados Patéo. Los timorenses son de carácter amistoso, por ello, siguen manteniendo una estrecha relación con su país vecino: Indonesia. A pesar de la larga guerra que terminó con más del 20% de su población, la influencia indonesia en la gastronomía local viene marcada por el arroz blanco, en ocasiones acompañado de salsa de tomate y verduras hervidas.
Si visitas Timor no puedes pasar por alto sus ordenados mercados de frutas y verduras, donde podemos encontrar maracuyá, granadilla, toda clase de aguacates, etc. Y no te olvides de tomar un buen café, es uno de los principales productos de la zona. ¿Dónde probar todas estas delicias isleñas? Sin lugar a dudas el sitio perfecto es una antigua casa colonial portuguesa, La Pousada de Baucau, perdida en un pequeño pueblo en el interior de la isla. Se trata de uno de los pocos edificios portugueses que se conservan en pie tras la larga guerra con Indonesia. El mejor pescado a la brasa lo encontramos en La Kumorre Guesthouse en la población de Balu, cerca de la isla virgen de Jaco. Por último, en la capital Dili, date un paseo frente al mar y relájate tomando algo fresco en Tito’s. ¿Te animas?
Texto y fotos: Laura Torres
Horario: Todos los días de 07:00h a 22:00h
Precio medio: 20 euros
Av. dos dereitos humanos, Metiaut, Dili, Timor Leste
Horario: Todos los días de 9:00h a 23:00h
Precio medio: 15 euros