Toño Canalejas lleva, con su puesto, más de 25 años recorriendo los mejores festivales. Y no lo hace solo, lleva consigo a toda su familia.
Cuando era joven, se dedicaba a la artesanía y la vendía en la calle. Hasta que conoció a Marian Ambrós, la fundadora de El Aladin; ella hacia los falafels a mano y él aprendió de ella. Al principio, todo era caótico; hacían hogueras en el suelo donde ponían sartenes a freír y no tenían personal. Pronto empezaron a profesionalizarlo con el tirón de ferias y festivales, compraron máquinas y formaron un equipo.
Cada día elaboran todas las salsas, el pan de pita y la masa de los falafels que dan de comer a miles de personas. Las colas que se forman en su puesto son interminables pero él, dinamismo puro, y su equipo trabajan a un ritmo diabólico y, en menos de un minuto, tienes la comida en tus manos. Toño, de 49 años, dice que una de sus virtudes es la capacidad de improvisación en la cocina y presume de que jamás le han devuelto ningún pedido.
Le gusta trabajar con su familia porque siente la tranquilidad y confianza de estar entre los suyos. Su mano derecha es su hijo Sergio Canalejas, actual ayudante del chef Michael Caines en Londres, aunque ya había estado en los fogones de Ferran Adrià o Michael Wignall. Sergio aprendió a cocinar desde niño y cuando tuvo que elegir un oficio no dudó: cocinero.
Son extremadamente amables y unos terremotos trabajando. No dudes en ir a su puesto a pedir un cous cous, pakoras o kebab a las finas hierbas. Será una de las mejores actuaciones de la noche.
Sobre estas lineas vemos al hijo, Sergio Canalejas, actual sous chef de Michael Caines.
Texto: Alba Yañez
Fotos: Cecilia Diaz Betz