A solo una parada de metro del principio de Passeig de Gràcia nos encontramos la Vila de Gracia, ese barrio/pueblo cosmopolita que nos gusta tanto a todos. Da igual si vives cerca o no, merece la pena gastar un día entero visitando sus calles y por supuesto sus locales más gourmet que nosotros hemos incluido en un plan especialmente para ti.
El desayuno – Mama´s café
No hay otro lugar mejor para quitarse el sueño que el Mama´s café donde Christina Czerniawski, la dueña, te preparará un desayuno tan bueno y potente como el que le hace a sus hijas.
Todo artesano y ecológico como unos Pankakes con fruta caramelizada y canela, huevos revueltos con ternera y espinacas o fantásticos sándwiches como el de roast beef con gruyere y champiñones. Enseguida notarás que Christina no es española y que quiere que salgas de allí con el buche bien lleno, no con un simple café que engañe a tu estómago.
Por supuesto, siguiendo su lema de comida saludable y responsable con el medio ambiente, también tiene carta para vegetarianos con sándwiches de tofu, aguacate, pimientos rojos, queso manchego y alioli, o de queso taleggio, espinacas salteadas y mermelada de tomate picante.
Mama´s café es la mejor manera de empezar la mañana con buen pie.
Foto: Cecilia Díaz Betz
La comida – La chitarra
Pasta fresca hecha a mano es lo que encontrarás en este magnífico restaurante dirigido y creado por Samantha di Paolo y Antonello de Felice, una pareja de italianos que al llegar a Barcelona y no reconocer “buena” pasta fresca en ningún local decidieron abrir el suyo propio.
Antonello se guía por los productos de la temporada, según el que sea juega con un relleno y una salsa diferente. Para empezar tienes los antipasti: olivas, berza en aceite, berenjenas encurtidas, queso scamorza ahumado o grellos friarelli por ejemplo.
Seguimos con el menú diario donde tenemos cualquier pasta que haya preparado Antonello ese día. Nuestra recomendación, la pasta de azafrán y las distintas variedades de sus maravillosos raviolis rellenos de guisantes y panceta, trufa y patata, tomate y provolone, y los gnocchi. Y llegó el momento del postre con el tiramisú o la pannacotta. Te desmayarás del gusto.
Foto: Cecilia Díaz Betz
El capricho – Lukumas
Sabemos que picar no es demasiado bueno, pero una vez al año no hace daño, y una vez a la semana tampoco, seguro. Así que para darte un capricho un Lukumas es lo más delicioso.
Los clásicos lukumas son los donuts en su formato griego. Son una pasta fermentada y frita que tiene forma de anillo y que puede estar glaseado, azucarado o recubierto de chocolate, chocolate con avellanas, crema, crema de caramelo, crema de limón, mermelada de fresa, albaricoque, frambuesa o con cobertura de cheessecream, café o mastiha (una especie de resina griega) por dar algunos ejemplos.
Espero que esto haya sido suficiente para convencerte de que no hay nada mejor que el lukumas para quitarte la gula.
Foto: Cecilia Díaz Betz
La cena – La Viblioteca
Llega la noche y estás tan lleno de todo el día que lo último que te apetece es un cenorrio, por eso te recomendamos La Viblioteca donde lo primero que te ofrecen es una gran variedad de quesos, su producto estrella, hechos a mano con leche cruda y no pasteurizada, acompañado de uno de sus más de 150 vinos naturales y ecológicos.
Cedric y Yolanda, los propietarios, han creado una carta magnífica en la que el producto estrella es el queso, claro, que puedes acompañar con mermeladas caseras. También cuentan con un bikini trufado, tartars y tortilla gourmet entre otras cosas igual de exquisitas.
Foto: Marta Parera
La copa – Bobby Gin
Novato o entendido da igual, cualquier amante del Gin&Tonic tiene lugar en Bobby Gin. Las distintas variantes que te ofrecen son infinitas, como por ejemplo tomarte un Gin Fonk y unos cracker con foie y manzana o una de sus hamburguesas gourmet. O un sashimi de salmón al Gin&Tonic, o también los langostinos con crujiente de arroz verde hinchado y salsa agridulce o el tataki de atún.
Pero si lo que quieres es dulce para acompañar con tu refrescante bebida, sin duda pídete el Urdemale Cake o el brownie de chocolate especiado al ron. No hay mejor manera de terminar la noche en este maravilloso barrio de Gracia con una copa en la mano.
Foto: Marta Parera
Texto: Alba Llamazares